Álvaro Palomo3 min lecturaMarco Asensio abandonó el pasado verano el Santiago Bernabéu con la carta de libertad para iniciar una nueva aventura en el PSG con la ilusión de relanzar su carrera a las órdenes de Luis Enrique y con Mbappé como compañero, pero, de momento, ha ocurrido todo lo contrario, con una caída en picado que se reflejó en un grave error el pasado domingo que le costó dos puntos a los parisinos ante el Lille.
El internacional español entró en el terreno de juego en el 81' por Dembélé con 0-1 en el marcador y en el tiempo de prolongación hizo un regalo al rival que terminó con el empate definitivo. Y es que Asensio arriesgó demasiado la salida del balón y lo perdió en una zona muy peligrosa con un pase mal medido, lo que aprovechó Jonathan David para establecer el empate sin tiempo para que el PSG reaccionara.
Este fallo supusieron muchas críticas al atacante, pues se sumaba a que, por ahora, no ha respondido a las expectativas despertadas por su fichaje. Sin embargo, Luis Enrique no quiso hacer sangre y en la cita de ayer miércoles contra el Metz le dio un total de 22 minutos, ingresando en el césped en el minuto 68' con 2-0 en el marcador en lugar de Kolo Muani. Con él sobre el verde, el Metz acortó distancias, pero Mbappé sentenció en la recta final con el 3-1 definitivo.
Es el partido en el que Asensio ha disfrutado de más minutos desde que cayó lesionado a mediados de septiembre con una contusión en el pie que le ha obligado a perderse un total de 12 encuentros, ocho de la Ligue 1 y cuatro de la Champions. Antes de esta lesión, el balear había comenzado la competición liguera como titular, siendo de la partida en tres de los primeros cuatro partidos, marcamdo dos goles ante Lens y Lyon en la tercera y cuarta jornada.
Sin embargo, una vez recuperado, Asensio ha perdido indiscutiblemente su sitio y no lo logra recuperar, como evidencia que desde que le dieron el alta médica y volvió a las convocatorias, el pasado 24 de noviembre, tan solo ha gozado de 48 minutos en un total de siete partidos, por lo que ni siquiera se puede afirmar que Luis Enrique lo esté usando como revulsivo, pues en cuatro de los choques que ha entrado en el campo nunca ha pasado de los 11 minutos.
Una situación que estaría haciendo mella en la moral del internacional, que puso rumbo al PSG con mucha ilusión y que ahora está en caída libre.