Iker Castaño3 min lecturaYassine Bono nunca olvidará la fecha del 31 de mayo. El meta marroquí fue el héroe de Budapest hace un año siendo el gran vencedor de la decisiva tanta de penaltis ante la Roma de Mourinho y justo un año después lo ha sido con otro equipo y en otra competición. En Arabia Saudí ya era uno de los jugadores más destacados a su llegada, pues ahora lo es más. Bono es noticia por ser el artífice (según la RAE, persona que ejecuta una obra con habilidad o destreza) principal de la tanda de penaltis de la final de la King's Cup.
El guardameta del Al-Hilal Saudi F.C. ha conseguido el triplete (Liga, Copa y Supercopa) y ha dejado sin sueño a todo un jugador 'top' como Cristiano Ronaldo, que desde su llegada a Arabia no sabe lo que es tocar plata. De ahí se entiende que acabara completamente abatido tras el encuentro ante el conjunto del ex sevillista Bono y también del ilustre Neymar.
Este viernes por la noche, el conjunto dirigido por el portugués Jorge Jesús disputaba la gran final de la Copa contra el Al Nassr de Ronaldo. Apenas habían pasado siete minutos de juego desde que rodara el balón cuando Malcom encontró a Mitrovic para que cabeceara al fondo de la red la primera del partido y abrir fuego. A media hora para el final y con el resultado en desventaja, Cristiano Ronaldo perdonó con un disparó al palo y su portero Ospina fue expulsado, quedándose con uno menos.
Eso sí, casi al final del encuentro el compañero de Bono, Al Bulayhi, fue expulsado y Al Nassr lo aprovechó con un tanto de Yahya. La alegría fue doble tras la expulsión de otro jugador del Al Hilal, que se quedó con nueve jugadores (roja para Koulibaly tras propinar un rodillazo en la cabeza al guardameta del Al Nassr) para afrontar la prórroga.
A pesar de la inferioridad numérica, aguantó y se apoyó en una gran actuación de Bono en los penaltis, deteniendo dos penas máxima a Ali Al Hassan y Meshari, para dejar sin el deseado trofeo a Cristiano Ronaldo, que lloró como si no hubiera un mañana al ver como se le escapaba un triunfo que parecían tener en la mano. El portugués vuelve a terminar la temporada sin títulos y desde que aterrizó en Arabia Saudí ha disputado siete competiciones sin éxito, alzando únicamente un torneo amistoso.