La de ayer fue una victoria histórica para Grecia. No todo los días se puede decir que juegas en un estadio de altura como el de Wembley y que además sales victorioso de allí. La selección griega consiguió la épica consiguiendo ascender hasta la primera plaza de su grupo en la UEFA Nations League gracias al doblete marcado por Pavlidis. El atacante del Benfica acaparó todos los focos mientras Tasos Douvikas, delantero del Celta de Vigo, acumuló una nueva suplencia en su expediente esta temporada.
Esta nueva selección de Lee Carsley está dejando mucho que desear, muy criticada por la prensa británica en estos últimos días tras la derrota ante Grecia por 1-2. ‘It’s all greek to Lee’, decía el Daily Express Sport en su portada tras caer ante los griegos, que quiere decir algo así como que no se entiende nada de la apuesta del nuevo seleccionador.
Douvikas se convirtió en una pieza importante la temporada pasada con el Celta de Vigo. Llegó como un futbolista desconocido y acabó siendo el hombre gol del equipo, con permiso de Strand Larsen claro está. El griego se desenvolvió a la perfección en la punta de ataque en la Copa del Rey, hasta el punto de consagrarse como el máximo goleador del torneo del K.O. incluso siendo eliminado su equipo en los cuartos de final por la Real Sociedad.
Sus trece goles y tres asistencias la temporada asada le valieron al bueno de Tasos para lleva la zamarra del ‘9’ esta temporada. Ni Borja Iglesias pudo quitarle la opción de llevar este dorsal, el griego se lo había ganado con creces. Eso sí, esta temporada parece que el ‘Panda’ le ha dejado bastante atrás a base de goles, siendo la opción número uno para Claudio Giráldez en la punta de ataque.
El atacante griego tan solo ha sido titular en tres ocasiones esta temporada en el Celta de Vigo. Fue durante ese período de adaptación de Borja Iglesias al inicio de la temporada. Arrancó desde el inicio en las dos primeras jornadas y más tarde frente al Athletic Club en San Mamés. Solo un gol en este curso frente al Real Valladolid.
De momento el delantero griego no está teniendo el protagonismo que se le auguraba tras la temporada pasada ni en su club ni en su selección. Aun así, para Claudio Giráldez sigue siendo una pieza importante, un hombre de segundas partes y un revulsivo asegurado.