Diego Lainez, cedido con opción de compra a Club Tigres por el Real Betis hasta el próximo 31 de diciembre de 2023, no está teniendo el aterrizaje esperado en Nuevo León. Tampoco es que le beneficie el bajón que experimenta el equipo auriazul desde la marcha de Diego Cocca, que ha asumido la dirección de la selección mexicana, y el desembarco de un Marco Antonio Ruiz que continúa estando terriblemente discutido, aunque sentado en el banquillo de una escuadra que ha descendido hasta la sexta plaza de la clasificación del Torneo Clausura de la Liga MX, a diez puntos del líder Monterrey, aunque sólo dos del segundo, pues está todo muy apretado entre la burguesía azteca. Tres derrotas en los últimos cuatro encuentros castigan a los de la UNAM, donde el de Villahermosa sigue sin tener el rol protagonista que buscaba cuando se interrumpió su cesión al Sporting de Braga.
El estreno como titular del extremo llegó, precisamente, en el reencuentro con sus ex del América, que vencieron por 0-2 en el Estadio Universitario. Lainez, que actuó siempre desde su aterrizaje pero nueve de las diez veces saliendo del banquillo, arrancó por la banda izquierda, la que menos le gusta (prefiere a pierna cambiada), teniendo una clara ocasión que abortó el meta Malagón, siendo sustituido a los 69 minutos por Nicolás Ibáñez, el habitual dueño de ese perfil. Un golpe de efecto que el todavía entrenador de Tigres buscó para que Diego hallase la motivación extra que le falta para demostrar que la apuesta realizada, con una opción de compra cifrada en siete millones de dólares (pagaderos en tres plazos) que, según algunos, no es más que un traspaso en diferido, tiene base. Hasta la fecha, el bético no ha respondido a las expectativas.
Unas horas antes de ese duelo contra la entidad azulcrema, el atacante quiso romper su silencio para contar su versión de una 'guerra' que no ha provocado ni deseado, por lo que aprovechó su charla con el conocido 'youtuber' Pello Maldonado para puntualizar algunos aspectos: "La verdad es que no lo considero justo (ser considerado el malo de la película), porque no me lo merezco. Creo que salí por la puerta grande; pagaron 15 millones por mí y dejé un buen dinero al equipo, lo que pocos han dejado. Me fui campeón y bien con la afición. Obviamente, ahora estoy en Tigres, pero tampoco me gusta que me odien en el otro lado y me consideren un mercenario, porque es falso. Se dijeron algunas mentiras, pero no me gusta entrar en ese tema, porque me siento muy agradecido al América, donde me formé y desde donde pude dar el salto a Europa. Quizás porque yo tampoco salí a aclarar muchas cosas. Ahora, quiero hacer las cosas bien en Tigres, pero siento un infinito agradecimiento por ellos. Quedé un poco así yo... pero tampoco me desagrada, porque me sirve para crecer como persona y como futbolista".