Aunque aún falta más de un mes y son muchos los jugadores verdiblancos que todavía podrían salir en este mercado de fichajes, el cuerpo técnico del Real Betis ya ha recibido la noticia de que deben empezar a encajar el puzzle para la Europa League.
Tras confirmarse la cesión de Álex Collado ayer, Pellegrini cuenta con 26 efectivos en la primera plantilla, si bien Montoya está a punto de salir y se quedarían en 25. El principal debate que deben resolver el club en agosto es si inscribir a Chadi Riad, otro de los recién llegados, como jugador del filial o no. Por el momento, todo apunta a que terminarán haciéndolo.
Pero hay otro quebradero de cabeza más para el técnico chileno. Y es que, según el reglamente de la UEFA, a día de hoy, sólo podrían ocupar 23 de las 25 plazas que otorga la competición para su Lista A, que deberá presentar la entidad heliopolitana tres días después del cierre del mercado.
El motivo no es otro que la formación de sus integrantes. Tal y como dice la normativa, el club tiene que incluir, entre sus elegidos, a ocho jugadores formados en España (que entre los 15 y los 21 años hayan jugado al menos tres temporadas en clubes de nuestro país). Y para colmo, de esos ocho, al menos cuatro deben ser futbolistas formados en el club (un mínimo de tres temporadas en las distintas categorías del Betis entre los 15 y los 21 años).
De estos dos requisitos, el primero sí lo cumple el Betis, pero el segundo no. Sólo Rodri y Raúl García de Haro entran con este criterio. De esta forma, el 'Ingeniero' ya sabe que deberá echarle un ojo al filial si desea completar su listado, salvo que en agosto se refuercen con exjugadores béticos, como Ceballos, Junior Firpo o Fabián.
De esta forma, ahora mismo y sin contar con Montoya, Pellegrini debería prescindir de dos de sus jugadores. La grave lesión de Fekir y siendo conscientes de que no podría participar en la competición hasta el final de la fase de grupos, podría resolver una de estas dos incógnitas.
La noticia llega en plena semana de reestructuración y reorganización en las oficinas béticas de la plantilla, donde se le está dando prioridad a las salidas una vez realizadas siete incorporaciones (más la vuelta de Raúl García de Haro). Y este condicionante de la Europa League podría ser decisivo tanto para mover piezas en el escaparate como para apostar por jugadores de otro perfil como nuevos refuerzos.