Antonio José Medina3 min lecturaTodo el mundo estará este fin de semana pendiente de Joaquín Sánchez. Su suplencia en el Real Betis - Real Sociedad, en un partido en el que no jugó ni un minuto, le han dejado sin margen para lograr el último objetivo que tenía pendiente en su mítica carrera: superar el récord de partidos de Andoni Zubizarreta.
El club verdiblanco tiene este sábado un partido no menos importante ante el Barça, en la que será la última visita del mago de El Puerto al Camp Nou. De lo que allí ocurra, previsiblemente, dependerá si el equipo heliopolitano acaba la jornada en puestos europeos o sale de ellos por primera vez
Pero aparte del sábado, Joaquín tiene otro compromiso en el que será protagonista estos días. En su tierra, muy cerca de su pueblo se disputa en Gran Premio de España de motociclismo. El GP de Jerez es la prueba más caliente del Mundial y la que más aficionados a las motos atrae.
Joaquín estará este domingo en el Circuito de Jerez-Ángel Nieto. Y no sólo lo hará para disfrutar de uno de sus deportes preferidos sino que lo hará como protagonista. Casi coincidiendo con su retirada de los terrenos de juego, el director del circuito y la organización del Mundial le han encargado el privilegio de que sea el que saque la bandera a cuadros y dé el banderazo a la llegada de los pilotos a la línea de meta.
Eso sí, Joaquín Sánchez no podrá hacerlo para que gane su amigo Marc Márquez, ya que el piloto de Cervera sigue sin recuperarse de la lesión que se produjo en el circuito de Portimao y tampoco correrá en la cuarta prueba del Mundial de MotoGP. Le sustituirá en el GP de Jerez el valenciano Iker Lekuona.
Márquez sí ha estado en Jerez estos días y, de hecho, el jueves inauguró Garage 93, un espacio expositivo situado en la Alameda Cristina e el que se exponen las 6 motos con las que el catalán se ha proclamado campeón del mundo.
El capitán del Betis sí espera, al menos, disfrutar de una buena carrera en un circuito en el que los pilotos españoles se suelen crecer y casi todos los años aseguran varios triunfos. En MotoGP tal vez parezca más difícil, pero ya estuvo Alex Rins en Texas para demostrar que se puede hacer.