Fernando Mateos4 min lecturaCada verano, casi desde que hizo las maletas hace ya siete años, el nombre de Dani Ceballos vuelve a aparecer en la órbita del Betis, el club en el se formó, donde dio el salto a la elite y hacia el que ha lanzando constantes guiños durante todo este tiempo. No gustó nada su salida rumbo al Real Madrid por 16,5 millones de euros, cuando era considerada la más firme promesa del conjunto verdiblanco. Pero en los últimos años se habían tendido puentes para su regreso ante la falta de oportunidades en el conjunto blanco.
En realidad, siempre ha habido más ruido que nueces. Sí hubo un acercamiento en la etapa de Antonio Cordón al frente de la dirección deportiva. Pero el hecho de que el verano pasado, cuando su nombre volvió a salir a la palestra, acabara renovando con la entidad madridista hasta 2027 no gustó nada en la planta noble del Benito Villamarín, donde entendieron que el utrerano había jugado a dos bandas.
En este mercado, la posibilidad de su regreso ha sido más tenue, apenas avivada por su presencia en una comida junto a Joaquín Sánchez, que ahora colabora con la dirección deportiva. Pero el presidente, Ángel Haro, no quiso ser rotundo el pasado mes, al ser cuestionado por la posible vuelta del centrocampista. "A día de hoy es una opción remota, luego el mercado va poniendo las cosas en su sitio. Hoy no hay ninguna negociación abierta con Dani. Ha renovado en el Madrid y no veo que se den las circunstancias para que pueda recalar en el Betis. Lo que pueda pasar a medio plazo no lo sabemos. Nuestra obligación es preparar todos los escenarios económicos posibles y cuando el club requiera que tengamos alternativas estaremos preparados para dar ese paso al frente", explicó el mandatario.
Pero, una vez más, Ceballos no se ve fuera del Real Madrid pese a ser una de las últimas opciones de Ancelotti. Tras un paréntesis de dos temporadas en el Arsenal, afronta su cuarta campaña consecutiva en el cuadro blanco después de que la pasada sólo disfrutase de 864 minutos repartidos en 27 encuentros. Una situación que parece asumir sin más.
"Quedan todavía días de mercado, pero yo estoy feliz aquí. Ahora mismo estamos centrados en la Supercopa. Queremos volver, descansar y afrontar esa final de la mejor manera posible. El míster sabe lo que quiero, estoy contento, la pretemporada me ha servido para ganar confianza y hay muchos partidos. Tenemos que ver la situación. El míster sabe qué le pido, él me pide a mí cosas. No creo que movamos mucha ficha. Los minutos se ganan en el campo. 10, 20 ó 30 minutos con esta camiseta es mucho más que 10 partidos con otra. Es lo que decía Zidane en su momento, estar en el Madrid es lo más bonito del mundo. Para mí sería fácil tirar la toalla, quiero seguir luchando para tener minutos y eso se basa en la confianza que me dé el míster y en lo que me gane yo", ha asegurado tras la victoria por 2-1 sobre el Chelsea en la gira americana de su equipo, donde salvo sorpresa continuará en la 24/25.