Ez Abde y la pescadilla que se muerde la cola: intrahistoria de un cambio que no fue

Pellegrini cambió de opinión a la hora de realizar la última sustitución en Girona, decantándose por Rodri en lugar de su primera elección para relevar al 'Chimy'

Ez Abde y la pescadilla que se muerde la cola: intrahistoria de un cambio que no fue
El momento en que Fernando da órdenes al marroquí mientras se pone la camiseta. - DAZN
Óscar MurilloÓscar Murillo 4 min lectura

Corría el minuto 81 cuando el 'Chimy' Ávila se lesionaba al perseguir un balón en largo por la banda izquierda. El argentino, que había sustituido a Ayoze Pérez no hacía ni veinte, se echaba la mano a su isquiotibial izquierdo y se sentaba sobre el húmedo césped de Montilivi para ser atendido por los servicios médicos del Real Betis, que acababa de empatar a dos por medio de Willian José y se las prometía muy felices al contragolpe. En ese contexto, Manuel Pellegrini no tuvo dudas y señaló a Ez Abde, que estaba sentado en el banquillo. Fernando Fernández Escribano, su mano derecha, aleccionaba al marroquí mientras éste se quitaba la sudadera y se enfundaba la camiseta. No había calentado, aunque la urgencia mandaba. Unos segundos después, el cuarto árbitro daba prioridad al triple cambio del Girona FC, con Valery Fernández, Pablo Torre y Cristhian Stuani ya preparados para ingresar al campo, pero enseguida marcaba el '9' y el '7' en la pizarra electrónica.

Por eso, sorprendió que el relevo fuese, finalmente, Rodri Sánchez, de características diferentes al de Beni Melal, que, frustrado, volvió a su sitio. Luego, las especulaciones, multiplicadas cuando se pierde. Algunas fuentes malintencionadas apuntaban que el ex culé se había negado a salir tan poco tiempo, una acusación que se desmonta simplemente viendo cómo reacciona y se desviste, al tiempo que Radio Sevilla apuntaba este lunes que, en realidad, el 'Ingeniero' cambió de opinión al comprobar la tardanza del atacante criado en Alicante. Una afirmación que, igualmente, no concuerda mucho con las tomas de televisión, en las que se ve que Abde está, cuando el minuto 81 se refleja en la pantalla, solamente a falta de enfundarse la casaca verdiblanca. Desde La Palmera quitan hierro al asunto y lo achacan a una simple variación de los planes del entrenador. El entorno del fichaje más caro del mercado estival bético guarda silencio.

Sea como fuere, no está siendo ni por asomo la campaña soñada del norteafricano, ya sin el respaldo de su mentor en el FC Barcelona y en Heliópolis, Ramón Planes. Dentro del vestuario, su timidez le está impidiendo acoplarse más rápidamente. Apenas se le ve hablando con su compatriota Chadi Riad y con Nabil Fekir. Se relaciona poco con el resto, aunque varios destacan en 'pétit comité' su carácter positivo y tranquilo, lejos de cualquier queja por el reciente ostracismo al que le ha condenado el entrenador y siempre apoyando a los compañeros con una sonrisa en la cara. Ha marcado cinco goles y jugado 1.458 minutos, pero se ha quedado en el banquillo en dos de los últimos cinco encuentros, acumulando uno, dos y ocho minutos frente a Atlético de Madrid, Villarreal CF y Rayo Vallecano. No tanto como Assane Diao, pero, desde su regreso de la Copa de África y la recuperación de los refuerzos invernales, ha perdido el sitio. Con todo, los planes del club siguen siendo los mismos: paciencia y cariño. Habrá que ver si los suyos también.