Pese a sus evidentes problemas con un límite salarial sobrepasado, lo que ha impedido inscribir de momento a Dani Olmo, el FC Barcelona se sigue moviendo en el mercado para tratar de firmar a un lateral derecho y un extremo, posición en la que ya ha ido descartando a sus primeras opciones por la imposibilidad de hacer frente a operaciones del calado que requerían dichos nombres. Así, en el Camp Nou ya se han olvidado de Nico Williams o Luis Díaz, y todo apunta a que tocará hacer lo mismo con Rafael Leao.
Según el diario Sport, Deco ha vuelto apuntar alto y ha intentado el fichaje del futbolista portugués, pero la intransigencia del Milan ha provocado que prácticamente lo den por perdido. La idea era poder sacarlo de San Siro por unos 65 millones de euros, incluyendo al mismo tiempo algún futbolista cuya marcha redujese de paso la masa salarial. Pero el club italiano se ha mostrado contundente y ha remitido en principio a la cláusula de rescisión, que asciende a 175 kilos.
Ante esta situación, en las últimas hora ha cobrad fuerza una opción 'low cost', también en Italia. Así, el elegido podría ser finalmente Federico Chiesa, que ya ha respondido al interés azulgrana de forma más que receptiva. A sus 26 años, el internacional transalpino ha decidido que no ampliará el año de contrato que le queda con la Juventus, por lo que el conjunto turinés le busca una salida, antes de que se marche gratis el próximo verano.
Este factor juega a favor de los interés de la entidad culé, que confía en hacerse con los servicios del ex de la Fiorentina por 10 millones, aunque la 'Vecchia Signora' aprieta para intentar sacar 15 kilos. Mientras tanto, Chiesa ya ha dado el 'sí' y está incluso dispuesto a bajarse el sueldo para que el mismo tenga cabida en el estrecho margen salarial del Barça y así poder ser inscrito, según informa La Reppublica.
Actualmente, el extremo percibe 6 millones de euros por temporada, pero aceptaría firmar un contrato de dos o tres campañas a razón de 4,5 kilos por cada una de ellas. Con esas cifras sobre la mesa, Joan Laporta hace cuentas para intentar encajar todas las piezas, con el jugador de la Juventus dispuesto a esperar hasta la recta final del mercado. De momento, ya habría aparcado otras opciones como las del Chelsea, el Manchester United o el Inter de Milán. Su deseo es vestir de azulgrana, pero todavían faltan piezas en el puzzle.