Jan Oblak, que ha vuelto por sus fueros, ha demostrado en el choque ante el PSG por qué sigue siendo clave para Diego Pablo Simeone. No lo ha tenido fácil el esloveno quien, no hace demasiado tiempo, fue candidato a abandonar el Atlético de Madrid. Uno de los capitanes del conjunto rojiblanco pudo situarse en la rampa de salida, a pesar de que tiene contrato hasta 2028.
En la última ventana de transferencias, tal y como apunta Relevo, Jan Oblak contó con varias ofertas para abandonar el Metropolitano. Que se incorporara tarde por problemas físicos a los entrenamientos y que llegara Juan Musso quien, cuando ha tenido que jugar, ha demostrado que se encuentra a un buen nivel, tampoco han ayudado a reforzar la confianza del meta colchonero.
A pesar de las propuestas que tuvo encima de la mesa y de las circunstancias que le han complicado las cosas en algunos momentos, Jan Oblak siempre lo ha tenido claro. Quiere seguir peleando para volver a ser uno de los mejores porteros del mundo y, en estos momentos, esto pasa por permanecer en el Atlético de Madrid. Por ello, no ha querido escuchar ninguna de las ofertas que se le han presentado. Muestra de la lealtad al club rojiblanco, del que se ha convertido en una de sus grandes figuras con el paso del tiempo.
A pesar de que el club sí que podría haber estado abierto a una posible marcha, en el caso de que la oferta fuera interesante para todas las partes, tanto Oblak y su agente han querido dejar claro que no pensaban en salir. Después de todo, se terminó quedando en el Atlético de Madrid, con quien está logrando, de forma gradual, volver a su mejor nivel. En resumen, volver a ser el de siempre, el de las paradas milagrosas y el de las intervenciones providenciales para dejar la portería a cero.
Sin duda, la muestra de que el internacional por Eslovenia ha vuelto a la carga es su actuación en el partido ante el PSG. Los de Luis Enrique, quien no se explicaba la victoria colchonera, tiraron hasta en 22 ocasiones, siendo detenidos ocho por Oblak, quien sacó de quicio a todos los atacantes de la escuadra francesa. Igualando el registro que consiguió en Anfield en 2020, cuando consiguió el mismo número de paradas, ha demostrado que se encuentra en un buen momento y que atraviesa el camino para volver a su mejor nivel.
Oblak, quien comenzó el gol de Correa, clave para la victoria rojiblanca, se sinceró sobre el partido del Atlético en París. "El equipo siempre puede ganar, siempre tiene que entrar con esta mentalidad al partido, pero el fútbol a veces es raro, porque ante el Lille parecía que merecíamos mucho más y no consigues, pero hoy para algunos no merecíamos los tres puntos y los conseguimos".
"Yo entiendo a Luis Enrique, cuando no ganas un partido donde estás atacando, cuando lo pierdes al final es muy difícil de asimilar y aceptar, nos ha pasado a nosotros muchas veces también. Los puntos son lo importante, Nahuel se lo merecía el MVP porque estaba pasando un momento complicado y ha hecho un gran partido", apuntaba un Oblak que quiere usar su actuación en el Parque de los Príncipes como acicate para lo que está venir, lo que sería la mejor de las noticias para un Simeone que quiere aprovechar esta buena inercia para dar, de forma definitiva, el paso hacia delante que tanto necesita su equipo.