El juez que instruye el denominado
'caso Osasuna', por desvío irregular de dinero y amaños, ha archivado la acusación respecto a once investigados, entre ellos los futbolistas
Patxi Puñal, Damià Abella, Sergio García y Jorge Molina, así como del actual entrenador de Osasuna,
Petar Vasiljevic.
Fermín Otamendi, titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona, ha acabado la instrucción del caso y ha cifrado en 2,2 millones de euros el dinero extraído sin justificación de las cuentas del club navarro, que no está imputado como persona jurídica, informa el
Tribunal Superior de Justicia de
Navarra.
El juez ve indicios para juzgar a exdirectivos de Osasuna, durante la presidencia de Miguel Archanco (2012-14), y
tres exjugadores del Betis por un supuesto delito de amaño de dos partidos:
Antonio Amaya, Jordi Figueras y Xavi Torres.El juez considera que de las 29 personas investigadas hay indicios para juzgar a 18 de ellas por los delitos de apropiación indebida, societarios, falsedad en documento mercantil, falsificación de las cuentas anuales y corrupción deportiva (por el supuesto amaño de partidos).
Estos delitos fueron presuntamente cometidos durante el mandato de
Miguel Archanco o con posterioridad "para justificar las actuaciones ilícitas cometidas en ese tiempo".
Sobre la compra de partidos, el juez estima que hay indicios de que exmandatarios de
Osasuna pagaron a tres jugadores del Betis,
Antonio Amaya,
Jordi Figueras y
Xavi Torres, 650.000 euros en metálico, 400.000 para que ganaran al Valladolid y 250.000 para que perdieran con el club 'rojillo' en los dos últimos partidos de la temporada 2013/14.
En el auto por el que concluye la investigación, que puede ser recurrido, el juez da traslado al fiscal y las acusaciones -Osasuna y la Liga de Fútbol Profesional (LFP)- para que en el plazo común de 20 días presenten sus escritos de acusación frente a los 18 investigados contra los que continúa el procedimiento.
El mismo juez instruye en otras diligencias -pieza separada B- los delitos presuntamente cometidos durante el mandato presidencial de Patxi Izco (entre 2002 y 2012) sobre los que no versa esta resolución.
En este auto de conclusión, el magistrado aprecia "indicios racionales de criminalidad" en las actuaciones llevadas a cabo por
Archanco, presidente entre 2012 y 2014, el exgerente Ángel Vizcay, y los exdirectivos
Txuma Peralta, Juan Antonio Pascual, José Manuel Purroy y Sancho Bandrés.El juez también estima que hay indicios para enjuiciar también a
Diego Maquírriain, exdirector de la Fundación Osasuna, que "transportó hasta Sevilla parte del dinero para su entrega a los jugadores béticos".
Asimismo, a los dos supuestos agentes inmobiliarios investigados,
Cristina Valencia y Albert Nolla, que firmaron un recibo de 900.000 euros "conociendo su falsedad y a cambio de dinero".
También a los miembros de la comisión gestora que dirigió el club durante unos meses tras la marcha de Archanco:
Javier Zabaleta, Luis Ibero, Pedro Zudaire, Juan Ángel Larrea y Jesús Dronda, por haber ordenado a Vizcay que "hiciera lo que fuera necesario, sin excluir la comisión de delitos, para justificar en la contabilidad las salidas irregulares de dinero".
Además, el juez considera que hay indicios para enjuiciar al exdirector financiero y actual gerente del club, Ángel Ardanaz, por haber confeccionado las cuentas anuales del club del ejercicio 2013/14 "a sabiendas de que contenían falsedades importantes".
En cambio, el magistrado decreta el sobreseimiento provisional de la causa respecto de los exdirectivos José Luis Roldán y Manolo Ganuza, los jugadores
Sergio García, Damiá Abella, Patxi Puñal y Jorge Molina, así como del actual entrenador de Osasuna,
Petar Vasiljevic, entonces en la secretaría técnica.
El magistrado sostiene que respecto a todos estos deportistas las declaraciones incriminatorias de Vizcay "no se han refrendado con ninguna otra prueba".
De igual forma, el juez archiva la causa en esta pieza principal respecto del exdirector general de Osasuna José Gómez, el excontable Tomás López, el exmiembro de la junta gestora Marino Zulet y el auditor Adolfo Suárez.