Vive el
Betis un momento muy dulce, tras sumar
20 de los últimos 27 puntos en LaLiga, lo que ha llevado al conjunto de
Pellegrini a la sexta plaza, a sólo tres puntos del quinto clasificado. Presumen ahora los verdiblancos no ya de su habitual juego directo, alegre y efectivo, sino también de una reconquistada fiabilidad defensiva que se traduce en dos porterías a cero consecutivas, con sendos triunfos por la mínima y con suspense ante
Getafe y Cádiz. Buena parte de culpa de esta mejoría atrás la tiene
Aïssa Mandi, de largo el central preferido del chileno, como la fuera también en su día de
Setién. E, igual que entonces, el franco-argelino está respondiendo con creces a la confianza.
Precisamente, en un semestre
clave para su futuro, pues, al no haber aceptado las ofertas de
renovación que le presentaron desde la planta noble del Benito Villamarín en el último año, quedará
libre el próximo 30 de junio, pudiendo negociar y comprometerse con quien desee desde el
1 de enero pasado. No lo ha hecho aún, pues el ex del
Stade de Reims tiene claros sus deseos y exigencias:
dos millones de euros netos en un contrato de media-larga duración y un proyecto europeo y
ambicioso. Por eso, ha rechazado
propuestas más o menos cuantiosas, aunque demasiado exóticas para su gusto, más aún en tiempos de pandemia. Espera al Betis.
Y lo hará, como ya se explicó en ED, al menos hasta el mes de abril, cuando tomará la decisión definitiva.
Mientras tanto, Mandi continúa labrando su caché con grandes actuaciones personales que redundan en el éxito colectivo. No en vano, ha sido
titular en 14 de los últimos 15 encuentros oficiales del cuadro heliopolitano (y en 15 de los 17 más recientes), que disputó íntegros además, incuyendo dos
prórrogas y una tanda de
penaltis. En ellos, cinco veces terminó su equipo con la portería a cero, mientras que otras seis únicamente encajó un tanto. En los tres restantes, caerían dos o más (el 4-3 de la visita al
Levante, el empate a dos en
San Sebastián y el 2-3 frente al
Barça). Todo ello, con el campeón de África como protagonista con su
intensidad, su capacidad de
anticipación, su facilidad para las
coberturas y su criterio en el pase (un
90,1% de promedio).
Que pueda salir en verano a
coste cero un zaguero de estas garantías, lógicamente, ha despertado la voracidad de importantes clubes europeos, de momento sin éxito en su tarea de convencer a Aïssa. El
Liverpool sonó en muchas quinielas desde hace un par de ventanas de transferencia, aunque tanto
Klopp como personas del entorno del futbolista desmintieron el interés.
Sí llegó, aunque no haya cuajado en forma de oferta concreta, desde Italia, pues el
Inter monitoriza desde hace tiempo al '23' bético, que, según publican ahora varios medios transalpinos, podría desatar un derbi de la Lombardía, pues también gusta al
Milan. Competencia seria para un Betis que confía en persuadir a Mandi con la capitanía de un equipo en franco crecimiento que juegue el año que viene la
Europa League.