José Antonio Rivero3 min lecturaA sus 69 años, Bertín Osborne se encuentra inmerso en un desafío que pone a prueba su fortaleza física y emocional. Desde finales de enero, su actividad en redes sociales y su presencia pública han disminuido drásticamente, lo que ha generado preocupación entre sus seguidores. Sin embargo, lo más inquietante son las revelaciones recientes sobre su estado de salud.
La hija de Bertín, Eugenia Osborne, compartió detalles sobre la situación de su padre en una entrevista con Europa Press. Según ella, Bertín está enfrentando las secuelas de una enfermedad, posiblemente gripe o COVID-19. Su recuperación está siendo más lenta de lo esperado, y su salud se ha visto afectada considerablemente.
Eugenia describió a su padre como "un poco pachucho" debido a las complicaciones que enfrenta después de haber contraído la enfermedad. Aunque se encuentra en un estado de salud regular, Bertín encuentra consuelo y alegría en la compañía de su familia, lo que demuestra la importancia del apoyo emocional en momentos difíciles.
Bertín recientemente se disculpó con sus seguidores de Alicante por tener que cancelar un concierto en dos ocasiones debido a su salud debilitada. A pesar de su deseo de cumplir con sus compromisos profesionales, la enfermedad ha obstaculizado sus esfuerzos.
En sus propias palabras, Bertín compartió la gravedad de su situación, describiendo su batalla contra el COVID-19 como "infinitamente peor" que su primer encuentro con el virus. Aunque agradeció el apoyo recibido, reconoció que no está al 100% pero prometió hacer todo lo posible para cumplir con sus compromisos.
El declive en la salud de Bertín también ha tenido un impacto en su imagen pública y carrera profesional. Según informes de Personality Media para la revista Semana, su enfrentamiento con su ex, Gabriela Guillén, ha contribuido a una disminución en su popularidad en los últimos años.
Bertín busca consuelo y recuperación en su casa de campo en Sevilla, una espaciosa hacienda en Alcalá de Guadaira. Este refugio ha sido su santuario durante tiempos difíciles, un lugar donde se siente seguro y cómodo. A pesar de sus dimensiones, Bertín considera este espacio como su hogar, donde puede reunirse con su familia y encontrar paz.
Aunque su presencia en redes sociales ha sido limitada desde finales de enero, Bertín continúa su batalla personal por la salud y la recuperación, confiando en el apoyo de sus seres queridos y en su determinación para superar este desafío.