Viajar desde Túnez hasta Andalucía... para practicar piragüismo

El recorrido de Ghailene Khattali hasta llegar a convertirse en deportista olímpico es, sin lugar a dudas, una de esas historias de superación de lo más singular. Original del Norte de África, donde tiene el cetro y la corona del piragüismo tras proclamarse campeón en varias ocasiones, trató de proyectarse hacia cotas más altas. Para conseguirlo recorrió varios países de Europa Occidental como Francia o Alemania con clubes donde compitió hasta afincarse en Andalucía. Es concretamente Sevilla el lugar escogido por Ghailene para desarrollar su crecimiento. Y su técnico Germán García, uno de los grandes colaboradores a que su figura sea olímpica, narra en ESTADIO Deportivo las claves y principales diferencias con las que se topó su 'alumno' tunecino al llegar al río Guadalquivir.

Uno de los principales cambios con los que se topó fue el hecho de aumentar considerablemente su compañía. "Sí, bueno, él cuando llegó aquí estaba flipando, porque él está acostumbrado a entrenar solo con sus hermanos. Tiene varios hermanos, bueno, en total son cuatro hermanos, una hermana y tres hermanos. Y los tres hermanos han hecho piragüismo, pero claro, está acostumbrado a que uno de los hermanos hace una disciplina, el otro hace la misma que él... Pero siempre iban como muy solos, iban uno por un lado, otro por otro, nunca tenían como un grupo de entreno", cuenta Germán.

En el Club Náutico Sevilla, la superestructura le asombró: "Cuando llegó aquí, vio cómo estaba montado el club, todo lo que hay y la base de niños pequeños que hay en el club. Vio el equipo en el que se iba a meter para poder entrenar, para poder mejorar. Era tan grande y con tanta calidad, porque al final aquí estás compartiendo tiempo con otros deportistas que son seleccionados por la selección española. O sea que el tío vio esto y se sorprendió de haber llegado a un sitio donde le van a aportar mucho más de lo que conoce sobre el piragüismo".

En definitiva, la organización deportiva de Andalucía, su composición geográfica y, sobre todo, la de Sevilla, hicieron mucho para que Ghailene permaneciera en suelo hispalense: "Vio que por clima y por la ciudad, ya que al final el entorno está metido en un río en medio de la ciudad, eso para él también es una cosa... Él decía estar harto de viajar y que no es típico. No es típico en ningún sitio que pase el río que sea navegable para nuestro deporte. Pero no navegable en un barco que puede ser cualquier río, sino navegable para nuestro deporte, por el medio del río, teniendo las vistas que tenemos, pues es maravilloso".