La derrota el pasado sábado del
Baloncesto Sevilla en el Fontes do Sar ante el Río Natura Monbús Obradoiro (88-77) dejó a las claras que el equipo de Scott Roth sigue sin pulir algunas de sus lagunas.
Una de las más preocupantes, la defensa del lanzamiento exterior. En muchas ocasiones sin puntear siquiera, en esta novena jornada de la
Liga ACB, Alberto Corbacho y Pepe Pozas supieron sacar tajada de esta carencia de los hispalenses.
El primero convirtió 5 de 8 para lograr un 63% de acierto, y
Pozas hizo lo propio, tomando el relevo, y ‘enchufando’ los tres que lanzó. Una losa demasiado pesada para los sevillanos, pero que no es nueva. De hecho, contando sólo esta semana, los de San Pablo encajaron 23 triples entre el partido de Galicia y el del
Spiroudome en la Eurocup.
En el compromiso continental intersemanal, el Proximus
Spirou Charleroi castigó a los de Roth con hasta 14 lanzamientos de tres, que marcaron la diferencia y convirtieron en imposible la reacción. “No tengo miedo a volver a la dinámica de las derrotas del primer tramo de temporada, pues mis jugadores van mejorando día a día, es un equipo joven pero sé que llegaremos a elaborar un juego compacto y con nivel. Nuestra
preocupación no es mayor que en otros encuentros, pues somos conscientes de que saldremos adelante”, manifestaba Audie
Norris tras el encuentro del sábado.
No obstante, aunque el equipo mostró cierta mejoría en los duelos previos, las deficiencias en este particular aspecto hablan por sí solas. Con una media de 8,77 triples encajados en Liga y 8,42 en Eurocup, la defensa del tiro exterior cuenta con mucho trabajo por hacer. Los números lo demuestran. El ‘roto’ del
Spirou Charleroi y la facilidad de Corbacho y
Pozas el sábado obligan a tomar nota.