En el
Betis todos admiten que, lo ideal en la planificación de la presente temporada, habría sido cerrar al menos
dos o tres fichajes más en posiciones claves y que, si no lo hizo fue sólo por una
falta de liquidez que condicionó de manera decisiva el margen de maniobra de la dirección deportiva que comanda
Antonio Cordón. Una de ellas es el
centro de la defensa y, la otra, quizás la que menos esconden en el club, está en la
portería.
No es ningún secreto que durante todo el mercado estival hubo
conversaciones avanzadas con Rui Silva y tampoco que hay un
pacto con el actual meta del Granada para seguir dialogando de cara a
2021. No obstante, el portugués ni estuvo ni está solo en la agenda de la entidad verdiblanca, que seleccionó una
terna de candidatos bastante perfilada. Según ha podido saber
ESTADIO Deportivo, además de con Rui Silva, el Betis también estuvo haciendo cuentas en verano por
Fernando Pacheco (Alavés) y por
Marko Dmitrovic (Eibar), otros dos porteros muy del gusto de los técnicos.
Para ello era necesario ingresar antes. Cuando empezaron a tantear a los tres, había factibles
posibilidades de vender a jugadores como
Loren Morón o William Carvalho. Con el dinero que recaudasen, antes incluso que el central, querían fichar a un
portero de garantías para competir con
Joel Robles o forzar así al getafense a aceptar alguna de las
ofertas que manejaba de fuera de España y que no terminaban de convencerle.
Finalmente,
no hubo ventas, así que no había margen salarial ni liquidez para comprar, por lo que en el Betis decidieron
apostar por el coste cero (como en el resto de fichajes) con la llegada de
Claudio Bravo, quien también estuvo siempre en los primeros puestos de la lista, aunque quizás con otro
rol diferente. El escenario ideal del director deportivo era renovar el arco con un meta de la
experiencia y el
liderazgo del veterano internacional chileno y con otra contratación más de largo plazo. Ésta es la terna que manejó en el periodo estival y la
hoja de ruta de cara a 2021.
Rui Silva, el gran favorito
Rui Silva (26 años, 1,91 m)
no va a renovar con el Granada, que se mantuvo firme en su intención de no venderle pese a saber que el año que viene se marcharía gratis. Hubo
mucha sintonía entre Antonio Cordón y el portero del Granada en las conversaciones de los últimos meses y, según adelantó hace unos días
Canal Sur Radio, llegaron a
pactar las condiciones económicas de una posible llegada al Betis e incluso un posible
contrato de tres o cuatro temporadas. La entidad de Heliópolis le ha mantenido informado en todo momento de que, si no ha ido con más fuerza a por él, es sólo porque
no podía permitirse el pago de su cláusula de rescisión (15 millones), que era la única manera de sacarle de Los Cármenes.
El flamante internacional portugués, sin duda, es la
primera opción del Betis; pero ya este verano hubo un fuerte interés del
Villarreal -que tampoco pudo satisfacer la alta exigencia nazarí- y previsiblemente
la competencia aumentará de manera notable si, como tiene decido a día de hoy, Rui Silva acude al mercado estival de 2021 como
agente libre. Ya sonó su nombre para equipos como el
Atlético, que buscaba un relevo para Oblak tras la salida del exbético Adán, o el
Sevilla, que aunque finalmente apostó por la continuidad de Bono maneja la posibilidad de fichar, ya que Vaclik acaba en junio.
El nuevo tablero de una negociación con Rui Silva se fijaría en el
verano de 2021. Eso, si antes no llega a Los Cármenes una
oferta seductora para el jugador en el mercado invernal y que haga al Granada decidirse por hacer caja seis meses antes de que expire su vinculación.
En el Betis no se fían en absoluto de lo que pueda pasar y manejan todos los escenarios para mantener las
espaldas cubiertas; ya que tienen claro que abordar una renovación en la portería verdiblanca debe ser y es
una de las grandes prioridades de la dirección deportiva a corto plazo.
Dmitrovic y Pacheco, alternativas
Rui Silva no está solo en la agenda de Cordón. El Betis también lleva meses pendiente de
Marko Dmitrovic (28 años, 1,94 m) que también
termina contrato en junio de 2021 y que, al menos por el momento, todavía no ha hablado de renovar con el Eibar.
Cordón ya ha contactado con él a través de sus representantes y el serbio se ha mostrado
receptivo antes los primeros tanteos del club de las trece barras y la gestión queda pendiente para ser retomada
de enero en adelante.
Además, el Betis
no pierde de vista a Pacheco (28 años, 1,86 m). El pacense ya fue una
opción muy viva en verano, si había ventas. El Alavés le dejó claro que
por menos de 10 millones no se mueve de Vitoria y, además, allí es el capitán y tiene uno de los sueldos más altos del conjunto vasco como premio por su última renovación. Ambas entidades mantienen muy
buenas relaciones después de las gestiones para ceder a Víctor Camarasa y a Ismael Gutiérrez el curso pasado.
Tanto es así, que según apuntan a
ESTADIO fuentes de toda solvencia, Cordón y su homólogo babazorro, Sergio Fernández,
llegaron incluso a hablar de cifras concretas e incluso de
fórmulas alternativas a un traspaso que en Heliópolis no se podían permitir, como una cesión con obligación de compra o el pago de un fijo asumible y muchas variables de fácil consecución.
Finalmente, tampoco fue posible. Eso ocurrió cuando en la planta noble del Benito Villamarín aún contaban con vender y buscaban un gasto menor a los 15 kilos que exigían desde Granada por Rui Silva.
De cara al verano, con la opción de hacerse a coste cero con el portugués o con Dmitrovic,
el Betis no contemplaría en un principio
abordar una inversión como la que exigiría el Alavés por Pacheco, pero el extremeño gustaba y gusta.
Incierto futuro para Dani Martín y, sobre todo, Joel
Así las cosas, no resulta arriesgado predecir que el año que viene
habrá un 'overbooking' en la portería del Betis, lo que dejará un incierto escenario para
Dani Martín (22 años, 1,87) y, sobre todo, para
Joel Robles (30 años, 1,97 m). Y es que la certeza de que
Claudio Bravo siga en la 21/22 es total -firmó
dos temporadas y no 1+1 como se especuló en un principio- y al cancerbero andino se unirá otro portero de garantías para competir con él.
Con el asturiano, la idea es
retomar en enero los planes de cesión que truncaron una lesión de tobillo en un entrenamiento con la sub 21 que le obligó a pasar por el quirófano y, en todo caso, regresaría a final de curso; pues hay
esperanzas de futuro con él. Incluso tendría opciones de quedarse como
tercer portero. El getafense, por su parte, entrará en su último año de contrato (2022) y sería la
última oportunidad de sacarle algún rédito económico.