Los clubes
portugueses están bastante
activos en este arranque del
mercado veraniego, con las miras puestas fundamentalmente en
LaLiga. De esta forma, el
Sporting Clube continúa dilatando las negociaciones por
Zou Feddal,
que parecían cerradas hace más de un mes, pero que han sufrido varios
retrocesos por diferentes cuestiones, como el deseo del club lisboeta de retocar un
acuerdo ya cerrado, la petición por parte bético de
garantías de pago, la falta de
fondos para acometer la operación o las vacaciones de un directivo clave para firmar por parte lusa. Ahora, parece que el asunto estriba entre las dos partes no heliopolitanas.
Así, desde la planta noble del Benito Villamarín
autorizaron que el central marroquí se quedase en Sevilla y no viajara el martes a
Marbella junto al resto de sus compañeros para realizar el '
stage' de pretemporada. En principio, todo hace indicar que el Sporting respetará el
pacto económico inicial (2,7 millones de euros fijos y 800.000 en variables), aunque desde La Palmera sólo aceptarán el
aplazamiento a largo plazo con garantías bancarias. Los 'Leoes' sí han pedido un
esfuerzo a Feddal para que rebaje sus pretensiones (iba a cobrar poco más que aquí, un millón de euros netos, hasta 2024) para cuadrar los números, pero los agentes del norteafricano piden a cambio una
prima de fichaje de medio kilo.
Entre tantos, los albiverdes, que ya contrataron al lateral zurdo
Antunes y tratan de convencer al meta
Adán, han aprovechado para concretar otro fichaje que también interesaba al Betis. Se trata del carrilero diestro
Pedro Porro, cedido por el
Manchester City en el Valladolid y que llegaba este jueves a la capital portuguesa para pasar
reconocimiento médico y firmar su nuevo contrato. Los ingleses lo
ceden por dos campañas al Sporting, que se hace cargo de su ficha (
400.000 euros) y tendrá en 2022 una opción de compra por
8,5 kilos. Una buena gestión de Hugo Viana, que prefiere seguir regateando por Feddal.
Y el
Benfica se ha lanzado en serio a por un central que está en la órbita heliopolitana, sólo a expensas de que haya en caja ingresos por ventas que financien el acercamiento. Se trata de Leandro
Cabrera, que cuenta con una cláusula para marcharse cedido a un equipo de Primera que asuma su sueldo, aunque podría ser traspasado, ya que las 'Águilas' han ofrecido al Espanyol
ocho millones por el uruguayo, aunque los 'pericos' exigen casi el doble (
15). Según los principales diarios lusos, todo podría cerrarse en un punto
intermedio.