El Betis ha regresado este miércoles a los entrenamientos, después de la jornada de descanso de la que disfrutó el martes. La plantilla ha comenzado a preparar el partido del próximo domingo ante el
Leganés en Butarque, un choque fijado para las
14:00 horas.
Para esta sesión, Rubi ha podido contar con
Emerson, Canales y Fekir, que el pasado lunes, en la sesión de recuperación tras el choque ante el Barça, se ausentaron por diferentes molestias que parecen haber superado en su totalidad. Los tres trabajaron con absoluta normalidad, como Andrés Guardado. El mexicano, que cayó lesionado en el encuentro contra el Getafe, ya se ejercitó con sus compañeros el pasado lunes y lo ha vuelto a hacer este miércoles, por lo que todo hace indicar que podrá estar a disposición del míster para la visita a Leganés.
El que sigue al margen de sus compañeros es
Antonio Barragán. El lateral compareció en el césped pero estuvo completando trabajo específico con los recuperadores del equipo. Del mismo modo,
Rubi ha vuelto a citar al canterano Rodri, que suele alternar sesiones con el primer equipo y con el filial.
De lo que siguen pendiente en el Betis es de la decisión de los Comités disciplinarios después de que el Betis presentase alegaciones al acta de
Sánchez Martínez tras su expulsión el pasado domingo en el encuentro ante el F.C. Barcelona. En el Betis entienden que la segunda amarilla por protestar es más complicado que se la retiren, pero confían en la indulgencia de Competición para que el francés pueda estar el domingo en Butarque.
La plantilla tiene previsto acudir a un
almuerzo institucional en un conocido y céntrico restaurante de la capital, al que acudirá parte del consejo, con el presidente, Ángel Haro, a la cabeza.
Ya para este jueves, el equipo seguirá trabajando con una nueva sesión en la
Ciudad Deportiva Luis del Sol.