Muchos son los que coinciden en que el
Gerena ha sido el equipo de moda de la última década en el fútbol amateur sevillano. Fundado en 2006, de la mano de
José Juan Romero llegó a
Tercera desde Segunda Sénior y se quedó a un paso de plantarse en Segunda B. Aquel buen hacer en la localidad minera, con el actual técnico del filial bético como jefe de operaciones, sigue dejándose notar, en este caso en el
Betis.
Con el debut el pasado jueves de
Iván Navarro ante el Benfica, ya son tres exjugadores del
Gerena los que pueden alardear de haber debutado con el primer equipo verdiblanco. En relación al extremo, su ascenso ha sido vertiginoso en el último año: ha pasado de jugar en el juvenil del San Juan al primer equipo del
Betis, con pasos previos por Gerena y Betis B. Cabe recordar que ya estuvo en la cantera bética hasta infantiles.
Una historia parecida es la de
Nacho, que jugó media hora ante la Balona y el segundo tiempo contra el Arcos. El central, tras completar un buen curso con el filial, estuvo a las órdenes de Quique Setién en Montecastillo. Al igual que Iván Navarro, tuvo que que salir de Los Bermejales (donde estuvo de infantil a juvenil) y demostrar su valía en el Gerena, de donde lo reclutó José Juan hace dos veranos. Ha sido renovado por el club recientemente.
El tercer 'minero' bético es
Rafa Navarro, a diferencia de los anteriores, futbolista del primer equipo a todas luces. La pasada campaña fue la de su consagración, ganándose en muchos encuentros la titularidad en el lateral derecho.
Buena sintoníaSe espera que con Setién el peso de la cantera sea mayor que en años anteriores, y por tres motivos. Primero, por el salto del filial a Segunda B; segundo, por ser un técnico a quien no le tiembla el pulso con los más jóvenes; y, tercero, su buena sintonía con José Juan Romero, con quien las conversaciones son fluidas.
Iván, en la senda de su bisabueloEl debut de Iván Navarro el pasado jueves con el primer equipo del Betis dejó una intrahistoria muy peculiar. Porque Iván siguió así la estela dejada por su bisabuelo,
Carmelo Navarro Hurtado, que también jugó en el equipo verdiblanco. Lo hizo a principios de siglo, fue delantero y goleador, y sus prestaciones también las disfrutaron el Sevilla Balompié, el Recreativo o el Híspalis, entre otros. Sin duda alguna, la vena bética y futbolística de Iván está más que justificada, siendo bisnieto de toda una leyenda del equipo de las trece barras.