Francisco Salas4 min lecturaUna de las máximas más valoradas y menos usadas en el deporte es la de saber irse en la cima, es lógico pensar que cuando mejor está un deportista, sobre todo si es veterano, es muy complicado decir adiós, pero ser capaz anticipar el declive es un gesto alcance de muy pocos. Lo hemos visto en Toni Kroos, quien se va a retirar del fútbol con 33 años, y aún quedándole mucho por hacer, pero lo va a hacer tras ganar la Champions League siendo clave. Pues bien, esto es en el deporte, pero en los negocios pasa algo similar, y este mantra la saben muy bien los propietarios de los Boston Celtics, que después de ganar la NBA, y con el equipo en máximos históricos de valor, han decidido ponerlo a la venta.
Fue la propia franquicia, la más ganadora en la historia de la liga, la que sacó a la luz que Boston Basketball Partners L.L.C., el grupo propietario del equipo, ha decidido poner a la venta la totalidad de sus acciones. En el comunicado oficial, el grupo propietario de los Celtics informó de que tomó la decisión "tras notable reflexión y discusiones internas" por razones familiares y patrimoniales. Por ese motivo, Boston Basketball Partners L.L.C. espera vender sus acciones mayoritarias en 2024 o a principios de 2025 y aseguró que Wyc Grousbeck se quedará al mando de la franquicia hasta 2028.
Los Celtics conquistaron este año el decimoctavo título de su gloriosa historia tras imponerse a los Dallas Mavericks en las Finales NBA, eso, sumado a la propia historia, y a la marca en sí misma, hacen que la franquicia de Boston tenga un valor de 4.700 millones de dólares, según estima Forbes. Lo más caro que se ha pagado nunca por un equipo deportivo han sido los 6050 millones que Josh Harris dio por los Washington Commanders de la NFL el año pasado. Mientras que en lo que se refiere a baloncesto, el récord son los 4000 mil que Matt Ishbia desembolsó por los Phoenix Suns, una cifra que será superada con holgura si los verdes terminan cambiando de propiedad.
El anuncio de la puesta a la venta se produjo en un día en el que los Celtics alcanzaron un acuerdo para extender el contrato de su estrella, Jayson Tatum, por cinco años y 315 millones de dólares, lo que sería el contrato más alto en la historia de la NBA. El anterior récord, de 305 millones de dólares, lo ostentaba el otro 'celtic', Jaylen Brown, MVP de las últimas Finales. También se aseguró la renovación de Derrick White, quien fue capital todo el año, y se llevará 126 millones de dólares por los próximos cuatro años.