Antonio José Medina5 min lecturaTodas las miradas están puestas en el domingo, en el ATP250 de Brisbane y en Rafa Nadal, pero el debut del tenis español en la temporada 2024 tuvo lugar la pasada madrugada en la United Cup 2024 que se está jugando en Perth y Sidney. Y lo hizo con victoria ante Brasil (2-1) después de que el andaluz Alejandro Davidovich y la valenciana Sara Sorribes doblegaran en el dobles mixto al equipo suramericano.
Previamente, los resultados de individuales habían confirmado lo que el ránking marca, en Davidovich es superior al brasileño Thiago Seyboth Wild y que la número 11 del mundo, Beatriz Haddad Maia, está por delante que la española, pese a que, a día de hoy, Sorribes es la número uno del tenis femenino español.
La United Cup es un torneo ideal para prepararse de cara al Open de Australia, ya que no hay la presión de caer eliminado y permite jugar varios encuentros en la fase de grupos; que se amplían si pasas a cuartos. El equipo español, en el que también están el granadino Roberto Carballés, la catalana Marina Bassols y el 'doblista' canario David Vega, está en el mismo grupo que Brasil y Polonia. A cuartos pasa el primero de ellos y uno de los mejores segundos, por lo que ahora tocará jugarse el pase ante la Polonia de la número uno, Swiatek.
Alejandro Davidovich abrió pista para resolver de forma contundente su partido ante un Seyboth Wild que se dio a conocer después de eliminar a Daniil Medvedev en el pasado Roland Garros. El malagueño tuvo que pelear el primer ser, pero a partir de ahí no tuvo rival y acabó ganando por 6-4 y 6-2.
A continuación se vieron las caras Sara Sorribes y Beatriz Haddad Maia, un duelo a priori más igualado y que cumplió con las expectativas. Se lo llevó la brasileña, pero tuvo que sufrir y llegar al 'tie break' en el primero y luchar también en el segundo, en el que llegó a ir un 'break' arriba. Al final 7-6(1) y 6-2 con la castellonense 'reservándose' para el decisivo doble.
En éste, España compitió con los dos mismos nombres, pero Brasil sí hizo cambios y metió un experimentado jugador por parejas como es Marcelo Melo. España ganó por 6-4 y 7-5, pero también sufrió, pues tuvo que levantar dos bolas de set en la segunda manga, que lo habrían abocado todo al desempate.
España se cruzará ahora con el, a priori, equipo más potente del grupo. Una Polonia en la que juega la número uno, Iga Swiatek, y todo un Top-10 como Hubert Hurkacz. Será ya en 2024, el día de Año Nuevo.
"El cara a cara con Hubi -Hurkacz- es de 3-2. Es un gran jugador, un Top-10 que estuvo el año pasado en Turín. Será un partido durísimo. He visto que él viene de jugar algunas exhibiciones, así que viene con ritmo. Lo voy a disfrutar. Formo parte del equipo español y eso es algo que me hace disfrutar. Daré lo mejor de mí", indicaba Davidovich, que reconocía habérselo pasado "en grande" en el dobles mixto.
Sara Sorribes, por su parte, no teme enfrentarse a la mejor jugadora del momento. De hecho, espera disfrutar. "Enfrentarte a Iga es increíble. Incluso si te gana, que es lo que pasó en nuestros dos últimos enfrentamientos, siempre aprendes algo. Tengo muchas ganas de jugar contra ella, trataré de disfrutarlo y dar lo mejor de mí, porque será difícil. Voy a decir algo que quizás no sé si debería decir, pero es la mejor. Así lo pienso", admite la española.