En los últimos meses no hay un solo hombre del que se hable más en el mundo del tenis -y casi del deporte- que de Jannik Sinner. Principalmente porque dio positivo en un control antidopaje, y aunque ha quedado casi solucionado, sigue siendo un tema muy espinoso que levanta cejas a lo largo y ancho del circuito. Sin embargo, en las últimas horas había saltado a la palestra mediática por algo muy distinto, ya que habían sonado las campanas, las de boda exactamente. Se rumoreaba intensamente que Jannik había pasado por el altar después del US Open para casarte con su pareja, la también tenista rusa Anna Kalinskaya, sin embargo, lo ha negado encarecidamente en el Masters 1000 de Shanghai que está disputando actualmente.
Al tenista de San Cándido le preguntaron tras arrasar a Taro Daniel en su estrello en la ciudad china sobre esta posibilidad, y entre risas la negó. “Para mí también fue algo nuevo, para ser sincero". Aunque ni siquiera quiso saber de donde había salido y prefiere seguir con su vida. "No, no pregunté y no pasó nada, no pasó nada". Eso sí, sigue con su relación con la jugadora rusa, actualmente en el puesto 12 de la WTA.
Ya volviendo al tenis, también opinó sobre unos de los temas más en boga, el calendario, después de que Carlos Alcaraz y Alexander Zverev defendieran que era necesario darle una vuelta. El número 1 les dio la razón, porque es obvio que tienen "muchos" torneos, pero también reconoce a favor de la ATP que salvo los Masters 1000, el resto los pueden elegir, y en caso de acertar con la selección, tiene mucho ganado. "Puedo elegir si juego en Pekín o si juego aquí. Siento que esta temporada elegimos los torneos correctos y el momento correcto, y para mí no fue un problema”.
No obstante, sí que haría una pequeña modificación, precisamente en este tramo final de campaña, ya que movería la Copa Davis. "Lo ideal sería que después de las Finals ATP no hubiera Copa Davis. Creo que eso es algo que cambiaría del calendario". Y es que es cierto que quienes llegan a la final de las ATP Finals y quieran estar en la fase final de Davis van a tener solo dos o tres días de descanso, dependiendo de cuando los haya cruzado el calendario, un golpe muy duro para el cuerpo. Aunque a su favor hay que decir que es el último gran momento de la temporada antes de que acabe del todo hasta 2025.