Francisco Salas3 min lecturaLa vuelta a la competición de Novak Djokovic tras su ausencia en Madrid ha sido cuanto menos movida, ya que en este Master 1000 de Roma tenía enfrente a un jugador como el francés Courentin Moutet, que tuvo la suerte de entrar al cuadro como 'lucky loser' tras caer en la previa. Pero el número 1 no ha acusado la inactividad y las sensaciones regulares de Montecarlo y ha logrado un triunfo incontestable, aunque eso sí, ha estado manchado por un botellazo que ha recibido en la cabeza mientras firmada autógrafos.
El serbio superó sin complicaciones su estreno con un triunfo firme en dos sets, por 6-3 y 6-1, para acceder a la tercera ronda donde se medirá al chileno Alejandro Tabilo. Djokovic no quiso muchos líos en uno de sus torneos favoritos y ni siquiera su mal inicio, en el que cedió dos de sus tres primeros servicios, pero se repuso rápido y acabó jugando un tenis que se asemeja mucho al mejor de todo el año.
Nada le sacó del partido, ni siquiera se fue de él cuando a su rival empezó a sonarle el móvil en mitad del juego. En apenas unos golpes certeros ya igualó a su rival y le dio la vuelta al marcador con 2 'breaks' más para poner el 6-3 inicial. El que sí jugó algo alterado fue su rival, que tuvo sus más y sus menos con el colegiado, con la raqueta y con la parte metálica de la red. Frustración provocada por la solidez del serbio, dominador absoluto del partido. Se tapó incluso con la toalla por sentirse tan inferior al favorito incontestable en Roma. Que en un abrir y cerrar de ojos, poco más de 1 hora superó su primera prueba en el Foro Itálico.
La nota negativa se vivió nada más terminar el partido, cuando 'Nole', en un gesto habitual del ganador del duelo, se acercó a la grada para firmar autógrafos a los aficionados, en su mayoría niños y para hacerse fotos. Pero en ese momento, uno de los aficionados, al estirarse hacia abajo para acercar su bolígrafo, dejó escapar de su mochila una cantimplora que golpeó al serbio en la cabeza, y se le vio muy dolido y en el suelo, aunque pudo levantarse, y pese a que acudió a la enfermería para controlarlo, es "probable" que no necesite ni siquiera un solo punto al ser una herida muy superficial.