Las elecciones de Estados Unidos ya son historia y desde este 5 de noviembre ya hay nuevo presidente de la mayor economía del mundo, y es el que estuvo durante cuatro años entre 2016 y 2020, Donald Trump. El polémico magnate, candidato del partido republicano, ha superado con mucha más solvencia de la que se esperaba a Kamala Harris para volver a la Casa Blanca. Y aunque parezca que no, este hecho afecta y mucho al deporte, bueno, realmente afecta a casi cualquier espectro de la sociedad, pero en este caso nos vamos a focalizar en uno de ellos, y concretamente en una única modalidad, la UFC.
Trump ha recibido mucho apoyo por parte de la compañía referente de las artes marciales mixtas. De hecho, él es un seguidor de la misma y no es raro verle en eventos importantes. Esto se debe a que le une una gran amistad al dueño, Dana White. Tal es la relación que White ha participado en mitines y ha pedido públicamente el voto para el millonario. Pero es que además, los luchadores norteamericanos se han lanzado en masa a apoyarle, como por ejemplo Sean Strickland, Colby Covington o Michael Chandler. Es decir, nombres de mucho peso que son referentes de una parte de la comunidad.
Pero no se queda solo en un apoyo, si no que la llegada de Trump puede traer también novedades a la UFC. Por ejemplo, hay un caso que destaca por encima del resto, el de Khamzat Chimaev, el checheno, que suele tener muchos problemas para poder pelear en el país y eso le ha lastrado en su camino al título. Pero tras ganar a Robert Whittaker en el UFC 308 declaró que esperaba la victoria del candidato republicano, porque seguramente le iba a dar un trato de favor para conseguir el visado. Y de hecho ha subido una publicación a Instagram celebrándolo.
También se puede ver beneficiado Joel Álvarez, quien últimamente solo ha podido pelear lejos de las fronteras estadunidenses por temas también de visa, y puede ver el cielo abierto. De hecho, el asturiano tiene programada una pelea en Tampa el 14 de noviembre en la última velada del año, donde también podría estar Alek Topuria. No obstante, para ver si es posible que Trump ayude a estos luchadores con problemas para participar en eventos en suelo 'yankee' habrá que esperar como mínimo unos meses, pues no será oficialmente Presidente hasta el 20 de enero.