Mikel Landa sigue demostrando en estos primeros días de la Vuelta Ciclista a España 2024 que lo vivido en la primera etapa fue un lapsus y que está a la altura de los mejores para poder pelear por el podio final de la tercera grande de 2024. El ciclista alavés del T Rex-Quick Step llegó a 14 segundos del dúo cabecero (Roglic y Mas) en Cazorla y está ya en el Top-5 de la ronda española, a más de 5 minutos del líder Ben O'Connor, pero a menos de minuto y medio de Primoz Roglic, que sigue siendo el gran favorito a ganar La Vuelta 2024.
Las rampas de la sierra de Cazorla volvieron a hacer estragos entre los candidatos. Enric Mas aguantó el apretón de Roglic y Landa se quedó algo, pero sacó segundos a Carlos Rodríguez y bastante ventaja sobre al resto de favoritos (Carapaz, Yates, Kuss...), quienes demostraron estar a estas alturas de la Vuelta a un nivel inferior a los que hoy ocupan las primeras posiciones.
"Ha sido una etapa explosiva y agónica, más de lo que fue en 2015 en la que la ascensión final fue más corta", señalaba un Mikel Landa, que tiene apuntado en rojo la etapa de mañana, con final en Granada y rampas muy duras previamente, y que pondrá fin a una primera etapa de la ronda española disputada por Portugal y el sur de España, antes de subir hacia el norte peninsular, donde se disputarán las a priori etapas más importantes. "Mañana será un día importante y ojalá seamos nosotros los favoritos. Queda mucha Vuelta", avisa el de Murguía.
Uno de los que se ha caído de las primeras posiciones era Wout van Aert. Era de esperar que el belga del Visma-Lease a Bike sufriera con la dura etapa jiennense, pero no que perdiera nueve minutos sobre Roglic. El motivo fueron unos problemas mecánicos que obligaron al bicampeón de etapa de esta Vuelta 2024 a hacer un gran esfuerzo para no quedarse fuera.
"No era para nada un buen momento, porque me he encontrado a cola del pelotón en un instante en el que muchos corredores se estaban empezando a quedar. Ha sido una persecución absurda, porque, al final, he perdido mucha energía y no he podido ayudar más al equipo", señala el belga, que ve cómo su líder, Sepp Kuss, cada vez está más lejos de poder reeditar el gran triunfo logrado en la Vuelta a España del pasado año.