La primera edición del circuito Premier Padel siendo la gran referencia del pádel mundial está apunto de llegar a su fin, aunque como toda fiesta va a tener un final a lo grande, con el Master Final que ha comenzado hoy en Barcelona. Y en él, las ochos mejores parejas masculinas y femeninas se van a medir en busca del título de maestros. Por lo pronto ya se han disputado los primeros duelos de cada uno de los cuadros, y mientras en el masculino la lógica ha triunfado, en la femenina ha habido una pequeña sorpresa.
La pista del Palau San Jordi está acusado la temperatura exterior de Barcelona, lo que ha generado que el juego de este Master se parezca más a Kuwait o Milán que a torneos como Madrid, es decir, que el juego sea espeso y pesado, con mucha menos pegada. Sobre el papel esto debería pesarle a un pegador como Juan Lebrón, sin embargo, no ha sido así. El del Puerto de Santa María, junto a Martín Di Nenno, pareja número 3, tenían un hueso con Lucas Bergamini y Javi Garrido, que venían en un estado de forma brutal, sin embargo, se han encontrado un partido inesperado.
Di Nenno ha controlado como en sus grandes noches, mandando a su antojo desde el 'drive' y dejando a Lebrón tocando menos bola, aunque según se ha ido entonando el Lobo, le han empezado a salir las cosas. Al final el partido ha tenido mucha menos historia de la esperada, definiéndose en dos sets, por 6-4 y 6-3, poniendo fin a la aventura del brasileño, que se coló en última instancia, pero se ha llevado la alegría de debutar en un Master. Además, tras el partido Di Nenno y Lebrón han confirmado su separación, por lo que estos van a ser sus últimos duelos.
En el cuadro femenino se enfrentaban la pareja 4, Marta Ortega y Sofía Araujo, contra la 5, Ale Salazar y Jess Castelló. La dupla hispano - portuguesa ha empezado mandando y se ha llevado el primer set a base de acierto e imponiendo un ritmo fuerte.
Sin embargo, a partir del segundo Salazar se ha echado la pareja a la espalda, demoliendo a la pareja rival a base de bandejas que no subían, control y una defensa férrea, hasta el punto de desquiciar a Ortega y sobre todo Araújo, que han visto como perdían la ventaja hasta caer por 3-6, 6-4 y 6-2.