"Es una Vuelta muy abierta, con pocas etapas al sprint, dos cronos y mucha de montaña. Casi todos los días son muy importantes. (...) Mi idea es estar en el cajón y el hecho de conseguir llevarme alguna etapa sería un sueño". Así llegaba Enric Mas a la Vuelta Ciclista a España 2024. Con ganas y esperanzas tras la decepción del Tour de Francia y haber preparado esta ronda a conciencia en altura.
Pese a su ambición, pocos contaban con el ciclista balear antes de que empezara La Vuelta, pero todo ha cambiado en esos primeros nueve días inolvidables. Enric Mas ha demostrado ser el líder que el Movistar Team estaba esperando. En las primeras jornadas fue de los pocos que aguantó las acometidas de Roglic, plantó cara al esloveno en las cuestas ce Cazorla y lo 'derribó' en las de Granada, aunque luego llegaran juntos a la meta tras llevarse un gran susto en la bajada.
Es, junto a Mikel Landa y Richard Carapaz, las grandes alternativas a Roglic para ganar la Vuelta a España, siempre con el permiso de un Ben O'Connor que llegó al liderato de forma sorprendente y va a vender cara su privilegiada posición.
La Vuelta 2024 arranca hoy en su segunda fase, en tierras gallegas, con un recorrido que propicio para que los favoritos sigan con su particular lucha. "Es la carrera que mejor me va. Cuando llega el calor extremo. Me encanta. Me encuentro muy bien cuando hace tanto calor, lo he vivido desde pequeño...", señala el ciclista de Artá en el programa 'Buenas noches y buenos goles' de Radio Marca.
Mas tiene claros cuáles son sus rivales. En primer lugar, el tricampeón Roglic. "Él ha ganado tres veces esta prueba y por eso tiene el respeto de todos", avisaba. Y, segundo, un O'Connor que se ha ganado a pulso el que lo sitúen como candidato al triunfo final. "Roglic y O'Connor son los dos rivales a batir", advierte el ciclista del Movistar, que se mostraba molesto de que, como pasara el pasado año con Kuss, alguien con el que no contaban les hubiera sorprendido.
"Ya es el segundo año consecutivo que pasa esto y que nos pasa esto. Tenemos que arreglarlo de alguna forma", añadía un Enric Mas que apunta a estas próximas etapas en alto para tratar de menoscabar la diferencia y, a ser posible, alcanzar el deseado cajón del podio. "Tenemos que aprovechar los finales en alto que quedan", advierte un Mas al que no le gustan esas otras que, como la de hoy o la de Granada, luego tienen una bajada tras el último puerto.