Este mismo jueves el COI (Comité Olímpico Internacional) ha retirado a la Asociación Internacional de Boxeo el reconocimiento. Consideran que, ante el “punto de no retorno” alcanzado por esta federación en los problemas relacionados con su gobernabilidad, era la “única solución”.
Ante esto, surge la duda sobre si el boxeo desaparecerá o no de los Juegos Olímpicos, a las puertas prácticamente de Paris 2024 y pensando en Los Ángeles 2028. La respuesta a la pregunta de si será un adiós al boxeo en este sentido es negativa y la ha dado Christophe de Kepper, director general del COI, en la 140 Sesion del organismo, que se ha reunido en remoto y de forma extraordinaria para tratar, en primera instancia, el futuro del boxeo olímpico. La medida tomada este jueves no implica, por tanto, que el boxeo vaya a desaparecer de los Juegos Olímpicos, es más, se incluye en el programa de París y Los Ángeles.
La Asociación Internacional de Boxeo (IBA) sufrió una retirada provisional del reconocimiento en el año 2019, desde entonces la situación estaba así. Los miembros del COI han seguido con la recomendación que había formulado su Comisión Ejecutiva: la retirada del reconocimiento ha sido decidida por una votación entre los miembros del Comité Olímpico Internacional, con un resultado de 69 votos a favor, 1 en contra y 10 abstenciones. De Kepper explicó que desde la IBA no se ha notado la voluntad suficiente como para desarrollar una evolución que necesitaba en lo relacionado con la corrupción, las finanzas y el arbitraje.
Desde el año 2020 un personaje muy cuestionado preside la IBA: el ruso Umar Kremlev. Las relaciones entre este el COI no han sido buenas, generándose una situación de pulso permanente entre ambos. El organismo entiende que desde la IBA y su presidente, no se han realizado las reformas que se necesitaban para garantizar ni la gobernabilidad de la federación ni la transparencia en nociones tan necesarias y claves como el arbitraje. Además, el presidente del COI hizo referencia a la incapacidad de la Iba parara diversificar sus ingresos y la dependencia financiera de la Asociación Internacional de Boxeo de la empresa Gazprom. Esa entidad está controlada por el estado ruso.
Se une a ello, que “las preocupaciones en materia de arbitraje no se han abordado satisfactoriamente”, según De Kepper. En lo que respecta a la integridad de las competiciones y según el directivo del COI, que la federación decidió no aplicar los sistemas de arbitraje que empleó el Comité Olímpico Internacional en Tokio 2020. Con ellos, se reducían la influencia del factor humano, además de minimizarse los riesgos.
Antes de que tuviera lugar la votación definitiva, el presidente del COI, Thomas Bach, quiso agregar que el problema no tenía que ver “ni con el boxeo ni con los boxeadores”. Pero el alemán agregó que estos “se merecen ser gobernados por una federación transparente y limpia”.
Ahora bien, sí habrá torneos de boxeo en los Juegos de 2024 y 2028, pero no estarán organizados por la IBA. Es lo mismo que sucedió en Tokio 2020, momento en el que la COI asumió el papel de organizadora.
Kremlev señala al expresidente de la IBA, KC Wu, como culpable de los males. El taiwanés llegó a ser miembro de la Ejecutiva del COI y también candidato a presidirlo. Algunas federaciones han trazado el esbozo para hacer una organización paralela: World Boxing. Esto es algo que cuenta con el apoyo de Estados Unidos, Suiza y más veinte países.