El
Helvetia Balonmano Prointegrada ya es cuarto. El equipo trianero consiguió una victoria importantísima frente al
Espectáculos Doble A WOP Balonmano Pozoblanco. Lo hizo en una demostración de carácter. Ese que sale cuando todo parece adverso. Ese que hace ganar los partidos. Ese que tienen los equipos grandes.
Muy mermados se presentaron los sevillanos. A las bajas ya sabidas de Torossian y Álvaro Espino, se unió a última hora, por lesión en el entrenamiento previo, la de Tony Sánchez. El pivote Manuel Carrillo, ausencia en principio por motivos personales, hubo de ser reclutado en el mismo día para completar la formación. Carlos González, máximo goleador del equipo, jugó tocado...
En un ambiente hostil, no entraron bien al partido los de rojo y negro. Pese a anotar el primer tanto, un contraataque finalizado por David Martínez, los sevillanos no consiguieron imponer su ritmo de juego. Espesura en ataque, contragolpes fallados, lanzamientos de los extremos a la madera€ y todo adornado con una gran número de intervenciones del meta pozoalbense, Salvador Santos.
Un 6-2 de salida en los primeros diez minutos fue contestado por un parcial sevillano de 0-3 comandado por Carlos de Sola. Fue un espejismo. El Pozoblanco devolvió un tanteo idéntico y manejó diferencias de tres y cuatro goles durante el primer tiempo.
Al descanso, el luminoso reflejaba un 13-10 favorable a los locales. Lo peor, además de las sensaciones, la exclusión por dos minutos a Raúl Martínez a falta de cuatro segundos. El 15 del Helvetia se mostró visiblemente disconforme con la decisión.
Todo cambió a la vuelta de vestuarios. Los pupilos de Fernando Castelló sustituyeron las dudas por determinación y sacaron el carácter que llevan dentro. En un arrebato de locura ofensiva, el Helvetia Balonmano Prointegrada protagonizó un
increíble parcial de inicio de 3-12. El equipo endureció su defensa y encontró el acierto en ataque con un Álex Ramírez (cinco goles en la segunda parte) iluminado al contraataque.
El Pozoblanco realizó intentos para reducir la ventaja. Gracias a una doble inferioridad numérica de los sevillanos, los de blanco estrecharon la diferencia en tres tantos. Incluso tuvieron balón para bajarla a dos a falta de tres minutos. Pero el Helvetia no se amilanó. De nuevo intensificó su zaga y cerró el partido con tres goles consecutivos. 22-28 se leía en el marcador final.
Con esta victoria, la octava consecutiva, el Helvetia Balonmano Prointegrada
asalta el cuarto puesto, arrebatándoselo a BM Bolaños, su rival este sábado en El Paraguas. Ese partido también será otra 'final'.