El pádel es un deporte que ha ganado muchos adeptos en los últimos años hasta el punto de profesionalizarse hasta unas cotas que antes ni se soñaban. Por ello, son cada vez más lo que no solo desean practicarlo, sino mejorar en su juego y golpeo. Pues bien, dentro de esas variantes que ofrece este deporte tan dinámico encontramos lo que se llama el remate por tres. ¿Qué es? Lo explicamos.
Sin duda el remate por tres en uno de los golpes más populares entre profesionales y aficionados por su espectacularidad y efectividad. Básicamente se trata de golpear la pelota contra la pared de fondo logrando que salga por los laterales de la valla que marcan el perímetro de la pista.
Cuando hablamos de perímetro nos referimos a la zona en la que puede botar la bola y no a los límites para jugar. Aunque si se ejecuta bien el remate por tres suele acabar en punto directo, en algunas ocasiones los jugadores son capaces de salir de tal recinto y devolver la pelota desde fuera de la pista antes de que toque el suelo.
En realidad el remate por tres no deja de ser un smash con un objetivo concreto. Se trata de coger la bola lo más arriba posible para golpearla hacia abajo con violencia e intentar 'machacar' a los rivales. Sí, se necesita una gran potencia de golpeo para que surta efecto.
¿Por qué se llama así el remate por tres?
No se trata de darle tres veces a la pelota ni que haya tres rebotes. Tal nombre lo recibe porque la altura de la valla a superar mide exactamente tres metros (según medidas reglamentarias). Para que este golpe salga bien y sea realmente efectivo hay que darle a la bola con cierto efecto; es decir, no basta con un impacto plano para conseguir la paráola deseada.
¿Cómo realizar correctamente el remate por tres?
Intentarlo es sencillo, pero acertar con el remate por tres necesita de una técnica muy depurada. Como decíamos, hay que coger la pelota en el punto más alto posible, arquear el cuerpo y tener las piernas semiflexionadas para ganar el máximo impulso. En cuanto a la colación de la pala, esta debe ponerse abierta para lograr un efecto spin.
Hablamos de destreza, potencia y coordinación. Se trata de una evolución del smash, por lo que primero deberemos dominar ese remate básico. Por cierto, en el momento de golpear es importante llevar la pala hacia fuera para en el momento exacto del impacto soltar la muñeca y acelerar.