Poco a poco la política del
Real Madrid de apostar por jugadores jóvenes le está dando resultados. Esta temporada cuenta en su plantilla con
Rodrygo y Vinicius, dos ejemplos de esa nueva forma de fichar de la entidad blanca y para el curso próximo hará sitio a otros dos valores al alza a los que ha decidido incorporar.
O más bien reincorporar, porque las dos caras nuevas son las de
Martin Odegaard y Achrad Hakimi, que han superado con nota sus 'Erasmus' y están preparados para competir al máximo nivel en la escuadra de Concha Espina.
Odegaard es la gran revelación de LaLiga. Fue fichado muy joven por el
Real Madrid y a sus 21 años por fin ha explotado en el futbolista que se presumía cuando arribó al equipo blanco procedente del
Stromgodset. En la
Real Sociedad está demostrando todas las virtudes que atesora. Calidad en la conducción, combinación, llegada y gol. Mucho de lo que necesita el
Madrid para su medular.
A pesar de que hay un acuerdo tácito entre el equipo vasco y el madridista para que el internacional noruego juegue un año más en San Sebastián su magnífico rendimiento hace que en
Chamartín se vean 'obligados' a repescarlo.
Por su parte, Achraf es una estrella en la
Bundesliga, competición en la que también se hizo mayor
Dani Carvajal, con quien competirá el año que viene. El internacional marroquí sí ha cumplido los dos años de préstamo en
Dortmund, donde no sólo ha jugado de lateral diestro. También lo ha hecho por la izquierda e incluso de extremo hasta convertirse en un ídolo para los seguidores germanos.
El regreso de
Achraf supondría también la salida de
Odriozola, otra apuesta por la juventud, aunque en su caso no ha salido bien. Llegó como internacional y como una apuesta segura, pero en
Madrid asumen que perderán gran parte de los 40 millones invertidos en su contratación.