El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) anuló la resolución de la Federación Española de Fútbol (RFEF) que ordenó el descenso del Reus de Segunda B a Tercera división el pasado julio, por no depositar el aval exigido para competir en esta categoría tras ser excluido de Segunda por incumplimientos económicos. Según informó iusport.com, el TAD falló el pasado día 11 en este sentido y aludió a la vulneración de "varios de los derechos esenciales de todo procedimiento sancionador" que han generado "indefensión" al club catalán.
"Es innegable que la falta de notificación del acuerdo de inicio de procedimiento sancionador con trámite de audiencia redunda en perjuicio de la entidad, le produce indefensión e imposibilita el ejercicio de sus derechos al no darle conocimiento de la inadmisión del aval presentado y por tanto inicio del procedimiento ni del trámite de audiencia y su posibilidad de alegar al respecto, vulnerando de este modo varios de los derechos esenciales de todo procedimiento sancionador", afirmó.
Para el TAD, "la resolución dictada por el Secretario General de la RFEF se limita a afirmar la falta de constitución de aval y a aplicar de forma automática y sin más motivación la consecuencia, siendo únicamente en el informe emitido en el presente expediente, donde afirma la falta de validez del aval amén se su falta de presentación en original, su emisión en inglés, afirmando su no ejecutabilidad". El Tribunal consideró que el club debió tener "la posibilidad de alegar y justificar lo que a su derecho conviniese (...) en el seno de un procedimiento sancionador federativo".
"Su ausencia es determinante de la nulidad de la resolución por haberse dictado sin seguir el procedimiento extraordinario, ni ningún tipo de procedimiento con la mínima constatación de los hechos y su valoración por parte de la RFEF y con trámite de audiencia a la entidad, lo que conforme reiterada doctrina constitucional, genera indefensión al CF Reus Deportiú, SAD", concluyó el TAD.
La RFEF expulsó al Reus de Segunda B el pasado 17 de julio por no depositar el aval exigido para competir en esta categoría y días después abrió un plazo de tres días que los clubes interesados en ocupar su plaza depositaran la cantidad de 452.000 euros para poder hacerlo. La cifra se calculó de acuerdo a las deudas contraídas por el Reus con la RFEF y las de los clubes de la misma categoría, según el Reglamento General del organismo.
El pasado 10 de septiembre la Federación Catalana de Fútbol (FCF) excluyó al Reus del grupo V de la Tercera División por el impago de la deuda que mantenía con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), así como por la incomparecencia en los dos primeros partidos de la competición.