El Gran Premio de Australia de MotoGP ha tenido un inicio de los más complicado en la sesión del viernes debido a la climatología. En Philip Island ha caído la Mundial y eso ha provocado que no se haya podido correr la primera tanda de entrenamientos libres y los pilotos hayan llegado con lo justo a la segunda, donde pese a que ha salido el sol, la pista seguía húmeda. Y en esas condiciones, el más fuerte ha sido Marc Márquez, que ha mandado con autoridad, de hecho, solo se le ha acercado su hermano.
Los que han sufrido más han sido los líderes del certamen, empezando por Jorge Martín, que ha acabado en el suelo y casi es atropellado por Quartararo. Tampoco ha sido el día de Pecco Bagnaia, que se ha colado al final en la Q2. El que se ha quedado fuera de ella es Pedro Acosta. Y es que ha sido un día de supervivencia, con muchos golpes, banderas rojas por culpa de los animales, y alguna que otra sorpresa, por ejemplo, Álex Rins, ganador aquí en 2022 pero que ahora está muy lejos con su Yamaha, se ha colado en la clasificación de los 12 mejores. El que también tendrá que pelear por uno de los dos huecos es Enea Bastianiani, muy lejos de su nivel aquí.
La lluvia que comenzó a caer tras la primera tanda de entrenamientos libres de Moto2 ha marcado la jornada, pues obligó a retrasar durante casi dos horas y después cancelar la primera sesión de entrenamientos de MotoGP. La decisión se adoptó al encontrarse muy encharcada la pista en algunos puntos de la misma como para completar los 45 minutos a los que estaba programada la misma y tras una nueva salida a pista del coche de seguridad, se decidió retrasar varias veces esa primera tanda de MotoGP y poco después, cancelarla, aunque la siguiente, la práctica, se ha podido correr sin problema.
Seguramente este sábado alarguen los segundos libres, ya que entre la humedad, las caídas y los demás problemas, no se ha podido apenas probar nada, y antes de la sprint no tienen referencias. Aunque eso sí, se espera que las condiciones mejoren, pero eso no es sinónimo de nada, porque el tiempo en la isla oceánica es sumamente volátil, e igual que diluvia sale el sol, sin apenas aviso. Eso es una muestra de lo importante que va a ser la adaptación.
Ya avisó Marc Márquez de que la pista le venía bien al ser de izquierdas, pero si a eso se le suman las condiciones mixtas, es absolutamente imparable, ya que los problemas de su Ducati, que ahora es un poco más floja aún que la GP24, aquí se nota menos, ya que los tres primeros han sido GP23, las dos del Gresini y la de Marco Bezzecchi. Tampoco ha ido mal la Aprilia de Maverick Viñales.