Francisco Salas4 min lecturaEl Mundial de MotoGP llega este fin de semana a Australia para correr en uno de los trazados que mejores carreras deja, el de Philip Island, además con el aliciente de que tan solo quedan cuatro grandes premios y la clasificación está en un puño entre Jorge Martín y Pecco Bagnaia; sin embargo en tierras oceánicas van a tener un invitado de excepción a la fiesta, Marc Márquez, que llega a uno de los circuitos que más le gusta y donde es capaz de dominar pese a las dificultades. Y el de Cervera lo tiene claro, tanto que en lugar del perfil bajo que suele llevar, esta vez ha desvelado incluso la ventaja que puede tener.
Incluso pese a que desde que salió ardiendo su motor en Indonesia, las GP23 han sido 'capadas' tras perder una pieza del propulsor, lo que las ha hecho irremediablemente más difíciles de conducir, justo cuando el hexacampeón mejor estaba pilotando, lo que ha limado sus opciones de título. Pero ha seguido arriba y ahora llega un fin de semana donde tiene la capacidad de dominar.
Esto se debe a que según él mismo, las condiciones de Australia, una pista que no destaca por su agarre, le benefician. "La falta de agarre reduce la brecha entre el GP23 y el GP24, que tiene más dificultades" en estas condiciones. Aunque es algo finito, porque a medida que "avance el fin de semana, el agarre mejorará, los demás progresarán y las diferencias se reducirán", por debe estar arriba desde el principio, para lo que está probando nuevas estrategias. "Estamos empezando a encontrar nuestro camino desviándonos de los reglajes de los otros pilotos Ducati que hemos estado usando hasta ahora.
A favor del piloto español está que es el que se mejor se adapta, al menos históricamente, a las condiciones de Philip Island. En su vida ha conseguido ganar en cuatro ocasiones, tres en MotoGP y una en 125 (2010). De las de la categoría reina, la última data de 2019, pero ni en el 20 ni el 21 se corrió y en las dos últimas ediciones los ganadores han sido Zarco y Rins que no parece que vayan a estar en la pomada.
Martín, Bagnaia y Bastianini no han tenido nunca demasiado éxito en las antípodas, lo que sumado a la 'ventaja' que pueda tener el de Gresini, le hacen aún más peligroso. Pero solo sobre el papel, porque ya hemos visto este año que aunque en el pasado estos cuatro 'fantásticos' no hayan conseguido buenos registros en según que pistas, han llegado al Gran Premio y han conseguido ganar o al menos estar muy arriba. Primero, porque su capacidad de adaptación es brutal y segundo, porque la moto es superior.