Era un secreto a voces pero ha sido el propio Daniel Ricciardo el que lo ha hecho oficial. El piloto australiano dice adiós a la Fórmula Uno a falta de seis carreras para el final de temporada. El de RB pone fin a su carrera subido a un monoplaza y no se espera ni a finalizar el campeonato, lo que confirma la perdida de motivación del siempre sonriente Daniel.
Todo apuntaba a que el GP de Singapur iba a ser la última carrera en el Gran Circo del australiano, y hasta Max Verstappen, quién fue su compañero en Red Bull, quiso despedirse de él por radio. Sin embargo, aún no se había hecho oficial la marcha del piloto. Un adiós que sí es definitivo, como ha publicado el propio Ricciardo y el equipo RB en sus redes sociales.
El australiano llegó a los circuitos en 2011 y fue cogiendo experiencia hasta convertirse en uno de los pilotos que luchaba por la victoria, especialmente en 2014. Tras 257 carreras disputadas en las que ha sumado ocho victorias, el piloto de RB dice adiós al Gran Circo de la peor manera posible.
Estas últimas temporadas no ha rendido al nivel que se esperaba, de hecho, esta temporada sólo ha logrado sumar 12 puntos y está muy por detrás de su compañero de equipo, Yuki Tsunoda. Por ello, desde la escudería italiana han decidido darle salida sin esperar a que acabe la temporada.
"He amado este deporte toda mi vida. Es salvaje y maravilloso y ha sido un viaje. A los equipos e individuos que han jugado su parte, gracias. A los fans que aman este deporte a veces más que yo, gracias. Siempre habrá altos y bajos, pero ha sido divertido y la verdad sea dicha, no lo cambiaría por nada. Hasta la próxima aventura" publicaba el piloto en sus redes sociales a modo de despedida.
La escudería ha hecho oficial la llegada de Liam Lawson, que se unirá al equipo para lo que resta de temporada. A sus 22 años consigue un asiento en la categoría reina del automovilismo y acaba con la aventura de Daniel Ricciardo en Fórmula Uno. El neozelandés ya sustituyó a Ricciardo la campaña pasada, pero de forma provisional durante la lesión de muñeca del australiano. Y lo hizo bastante bien, llamando la atención de varios equipos, pero la parrilla ya estaba definida y Lawson no tenía hueco.
Ahora, un año después y después de acumular mucha experiencia en categorías inferiores, consigue un asiento fijo en RB, que apostará por una pareja formada por jóvenes promesas para luchar por escalar posiciones en la clasificación la próxima temporada.