La Fórmula Uno se ve envuelta en un nuevo escándalo que puede poner patas arriba el Mundial. Después de tres semanas de parón los monoplazas están listos para volver a rodar en los circuitos, pero el ambiente es más caldeado que nunca debido a una investigación de la FIA sobre un equipo que estaba desarrollando una práctica ilegal.
Al principio se desconocía de que escudería se trataba, pero este jueves, cuando los pilotos llegaban al circuito, saltó la bomba de que es Red Bull el acusado. La escudería austriaca estaba utilizando un sistema que servía para modificar la altura del monoplaza entre la clasificación y la carrera, algo prohibido según el reglamento.
Pero después de investigar el caso, la FIA no va a sancionar a Red Bull por montar este sistema ilegal. Lo único que tendrán que hacer será desmontar este sistema y volver a la competición como si nada. Pero no será hasta el GP de Brasil cuando puedan cambiar el monoplaza, por lo que en COTA todavía competirán con el sistema para cambiar la altura entre ambas pruebas.
Sin embargo, tampoco es la primera 'infracción' que la FIA deja pasar. Esta misma temporada fue McLaren el equipo que provocó la polémica por una pieza ilegal montada en el alerón. El equipo británico había incorporado un 'mini DRS' a su alerón trasero, que funcionaría igual que el dispositivo permitido, y les daba una gran ventaja en las rectas. Pero no recibieron sanción alguna, simplemente tuvieron que retirarlo del monoplaza para seguir compitiendo.
El principal perjudicado de esta 'artimaña' es McLaren, que a pesar de que han ganado en pista la primera posición en el mundial de constructores superando al equipo austriaco, Lando Norris persigue a Verstappen por el título individual. Por ello, este sistema en el monoplaza de las bebidas energéticas podría haber sido clave para que el neerlandés siga liderando la clasificación. Y su enfado con esta situación ha sido notable en Oscar Piastri, que se ha pronunciado sobre esta polémica. "Por lo que he oído y por lo que se ha dicho, esto no es explorar los límites, es claramente una violación de las reglas" afirma el australiano.
Por otra parte, Lewis Hamilton afirmaba que "Dios sabe cuánto tiempo lo han tenido y han estado ganando títulos" muy molesto con la ilegalidad de Red Bull en el coche. Sin embargo, estas quejas son para nada, ya que la FIA ha tomado la decisión firme de no sancionarles, y encima este Gran Premio lo competirán con este sistema ilegal, que pueden suponer puntos clave para el mundial.