Fernando Alonso no piensa en la retirada. Sus palabras en Las Vegas dejan claro que, al menos en 2026, sueña con poder luchar por el título mundial de pilotos y, previsiblemente, hacerle frente al intratable Max Verstappen. Pero, a sus 43 años, ya debe pensar en lo que pasará cuando deje la F1. Según el contrato que firmó con Aston Martin, en principio, seguirá ligado a la marca en otra posición diferente a la de piloto. Eso, aparte de seguir compitiendo en otras especialidades, como tantas veces ha dicho, como podría ser la IndyCar o volver al Rally Dakar.
Y, por eso, tal vez esté muy atento a lo que pueda hacer la escudería con sede en Silverstone cuando él lo deje. De momento, por contrato, podrá disfrutar de un año junto a Adrian Newey, pero, luego, alguien tendrá que tomar la batuta en un equipo que pretende situarse de forma continua en la lucha por el título en la máxima categoría del automovilismo.
Al igual que él, Lance Stroll también era confirmado este año en un equipo del que es dueño su padre. El piloto canadiense empezó bien la temporada, pero con la caída de rendimiento de los monoplazas verdes, no suma desde hace mucho. Stroll fue muy criticado cuando aún tenía su futuro en el aire y tuvo unas palabras, allá por el mes de junio, que hacían indicar que el idilio que vivía con Alonso ya no era tal.
"Fernando es un bicampeón del mundo y la gente lo ve como uno de los mejores pilotos de la F1, y lo cierto es que vamos 4-4 en clasificación este año. Los puntos son un poco engañosos porque a veces puedes tener averías... Eso a veces diferencia los puntos al final de la temporada. Miro mis últimos fines de semana y creo que han sido fuertes. Cuando miro el ritmo en este momento y la velocidad, como dije, vamos 4-4 en clasificación. La gente dice que Fernando es súper bueno y le gané los últimos fines de semana. Así que tómatelo como quieras", contestaba el norteamericano para defenderse de las críticas que recibía por sumar mucho menos que su compañero. Desde entonces sólo quedó en una ocasión por delante de él -un puesto- y apenas ha sumado.
Sin embargo, Fernando Alonso ha descartado que haya habido diferencias entre ellos y, lejos de eso, señala a Lance Stroll como su sucesor al frente de la escudería británica. "Espero que algún día pueda tener un coche competitivo y cambiar la opinión de mucha, mucha gente. (...) Trato de ayudarlo lo más que pueda porque él liderará el equipo muy pronto", señala en declaraciones a MotorsportWeek. De hecho, el piloto asturiano cree que su relación es "única", al menos con respecto a lo que él ha conocido en sus más de veinte años de experiencia en la Fórmula 1.
De momento, Lance Stroll está sumido en una crisis de resultados que va de la mano del mal rendimiento que está ofreciendo Aston Martin, al que Alonso sigue exprimiendo hasta el punto de quedarse a las puertas de los puntos este fin de semana en Las Vegas cuando el día anterior su coche era el peor en pista.