Carlos Sainz se despedirá de Ferrari a lo grande. Independientemente de lo que ocurra en el Gran Premio de Abu Dhabi 2024 de Fórmula 1, la Clasificación le ha consagrado una vez más. El piloto madrileño fue el único que le plantó cara a los McLaren, muy superiores al resto todo el fin de semana, y saldrá desde la tercera posición, con opciones de podio y de dar un disgusto a Norris y Piastri, como ya ha sucedido en más de una ocasión en la presente temporada.
Sainz se mostró muy regular durante toda la Clasificación e, incluso, acabó la Q2 en cabeza, pues su compañero Charles Leclerc, que inicialmente había hecho un mejor tiempo, fue sancionado por pasar los límites de pista y cayó eliminado. Eso hace también que Sainz sea la única 'bala' de Ferrari de cara a la lucha por el Mundial de Constructores, aunque, dada la superioridad de McLaren en Yas Marina, optar a ese título suena a algo utópico.
Sin embargo, no se conformaba. El español reconocía que quería despedirse de Ferrari a lo grande. Con un triunfo. "Lo voy a dar todo. Hoy he empujado en qualy como no lo he hecho jamás, quería esa pole y quería tener la oportunidad de ganar mañana una última carrera con Ferrari", afirmaba Carlos Sainz desde la misma línea de llegada.
El madrileño reconocía que será el último gran premio en el que podrá "pelear por ganar" en algún tiempo y no quería desperdiciarlo. "Mclaren ha demostrado que estaba un poco por delante de todos, estaba a dos o tres décimas. Parecíamos estar más cerca de ellos en la Q1 y la Q2, pero en la Q3 lo han sacado todo y estaba claro que tenían algo más que el resto", aseguraba el español, que promete lucha y se ve peleando por ganar este domingo: "Mañana intentaré buscar una oportunidad de ganar la carrera. El objetivo es ese, aunque será complicado. Ayer vimos que, en ritmo de carrera, los McLaren van igual de rápidos. Nos hemos puesto en una buena posición, ya que no estaba fácil la qualy. Hay que centrarse en hacer una buena salida y luchar por la victoria. No hay nada que perder así que iremos a por ello", advierte el futuro piloto de Williams.
Desde la organización le recordaban una vez más que este fin de semana no era uno más para él, ya que se despide de una escudería mítica, en la que ha dejado huella. Sin embargo, Sainz se mostró profesional hasta el último segundo y avisó que no tenía tiempo para pensar en ello. "No ha sido un fin de semana demasiado emotivo. El nivel de concentración es muy algo porque hay mucho en juego. No he tenido ni tiempo de pensar en la despedida. Mañana, antes o después de la carrera, me vendrá -las emociones-. Trataré de disfrutar de esta última carrera pilotando bien", concluía.