Simone Biles tiene la posibilidad en la mañana de este lunes -a partir de las 12:38 horas- de agrandar su leyenda. Ya acumula tres medallas de oro en los Juegos Olímpicos de París 2024 y lleva sumadas un total de 9 metales, tras los dos de Tokio y los cuatro que logró en su debut en unos JJ.OO., en Río 2016.
La gimnasta norteamericana fue la gran noticia de los últimos juegos. Desde Río era considerada como la indudable número uno de la gimnasta y la presión le pudo. En la capital japonesa ganó la plata con Estados Unidos en la competición por equipos, logró el bronce en la barra de equilibrio con un ejercicio que, según ha señalado ella posteriormente, no sabe ni cómo pudo 'aterrizar' en la barra y se retiró del resto de competiciones para recuperarse. Su situación abrió el debate sobre la presión a la que están sometidos los deportistas y la importancia de la salud mental.
Sin embargo, también encontró muchos 'haters' que aprovecharon la ocasión para tratar de hacer daño. Y, durante los últimos años, han atizado a la gimnasta cada vez que ha tenido ocasión. Hasta ahora... Simone Biles ha 'reaparecido' a lo grande, demostrando que no hay otra gimnasta como ella ahora mismo. De hecho, la brasileña Rebeca Andrade, subcampeona en Tokio, ha elevado su nivel y sus prestaciones, pero lo que en la capital nipona le habría dado para ser campeona olímpica, aquí, de momento, sólo le da para ser segunda. Así ha sucedido en el concurso general y en la final de salto.
"Después de todos estos años de trabajo mental, ha merecido la pena. Estoy superemocionada por estar de nuevo en este escenario", asegura Biles, quien aprovecha ahora para manda un mensaje a sus 'haters' y críticos: "Están ahora muy callados, qué raro".
Biles ha trabajado mucho en estos años para que este entorno tóxico no le haga daño y, al menos esa presión, no le afecte. "Los comentarios negativos son dolorosos hasta cierto punto. Duelen, pero sigo en terapia trabajando en todo eso, para asegurarme de que mi salud mental está bien. (...) El otro día vi a mi terapeuta. Vamos día a día para ver si necesito más terapia mientras esté aquí, pero de momento todo va bien", asegura la gimnasta norteamericana.
En este sentido, la gimnasta estadounidense siente que Los Juegos Olímpicos le ayudan a liberarse y lo está demostrando a base de resultados. "Los Juegos Olímpicos son un proceso muy agotador para los deportistas y son muchos días de competición, así que tienes que estar al tanto de tu estado mental y físico. Mientras lo hagamos, estaremos bien. Y hasta ahora me siento bien. Una vez aquí, la pista es nuestro escenario. Nos sentimos muy libres porque estamos en nuestro elemento, nos divertimos, hacemos lo que nos gusta", indicaba Biles.