París 2024 pone a Carolina Marín en su sitio

El presidente del comité de organización de París 2024, Tony Estanguet, habla sobre la dura imagen de la lesión de la jugadora onubense

Antonio José MedinaAntonio José Medina 4 min lectura

A poco más de dos días de que acaben estos Juegos Olímpicos de París 2024 ya han quedado atrás muchas imágenes icónicas y los héroes que habitualmente deja la competición deportiva más seguida del planeta. Desde la apertura, con Nadal portando la antorcha, pasando por las lágrimas de Djokovic, por un dúo inigualable como el que formaron Carlos Alcaraz y Rafa Nadal, con los nombres propios de Simone Biles, de Léon Marchand, de Duplantis, de nuestro Craviotto...

Sin embargo, habrá pocas imágenes tan recordadas como la de la lesión de Carolina Marín. La onubense es un referente del deporte a nivel mundial, estaba a un paso de meterse en su segunda final olímpica y se rompió el ligamento cruzado de su rodilla derecha en pleno partido. Las imágenes de su dolor dieron la vuelta al mundo.

Así lo ha reconocido el presidente del comité de organización de París 2024, Tony Estanguet, quien ha querido hacer un reconocimiento personal a Carolina Marín, que no quita que la propia organización o el COI le hagan otro honorífico en las próximas semanas.

"Quiero decirle, como atleta que fui, que no hay nada peor que lesionarse durante una competición", indica Estanguet en declaraciones al Faro de Vigo, donde reconocía que ese instante de dolor y frustración le habían impresionado. "Ese momento fue terrible. Así lo viví y lo siento mucho por ella. Lo primero que le deseo realmente es que recupere la salud y salga todo bien. También quiero transmitirle que hubo personas en todo el mundo que se emocionaron con su historia y su comportamiento. Lo sentimos mucho por ella, pero también queremos agradecerle el ejemplo que dio. Suyo fue uno de los grandes momentos de estos Juegos, porque realmente nos impresionó", afirma el dirigente galo sobre la onubense.

Carolina Marín honra al deporte en su peor momento

Carolina Marín no sólo impresionó por su desgracia sino, sobre todo, por el comportamiento que tuvo en ese momento tan duro, animando a su contrincante a prepararse bien para poder jugar la final. He Bingjiao se lo devolvió con un gesto en el podio que emocionó a la propia Marín.

Así lo reconocía en el comunicado que publicó para reflejar cómo estaba y agradecer todas las muestras de ánimo que había recibido. "Nunca había recibido tanto cariño. Está siendo inabarcable. Pero seguro que me dejáis destacar a una persona: animé a He Bingjiao a disputar un buen partido en la final, porque la deportividad estaba por encima de todo. El momento del podium es uno de los gestos más bonitos que han tenido hacia mí jamás y siempre le estaré increíblemente agradecida", indicaba la deportista andaluza, ejemplo para toda una organización olímpica. El reconocimiento que le hagan, una vez que no le pueden dar una medalla honorífica, estará más que merecido.