Las aguas no acaban de bajar del todo tranquilas por Mestalla. Si bien el curso pasado se dio un importante paso al frente de cara a dar forma a un proyecto solvente, el presente no espera a nadie y lo cierto es que el mercado de fichajes del Valencia CF está siendo una vez más bastante reducido. Sobre esto, y a diferencia de lo ocurrido en anteriores ocasiones, el entrenador del equipo, Rubén Baraja, se ha plantado a la hora de dejar claras sus peticiones y poner contras las cuerdas al club, que no tiene claro si podrá cumplir con las mismas.
"Todavía falta un extremo izquierdo para completar una plantilla, si bien quiero una plantilla corta de veinte jugadores de campo y tres porteros. Tenemos cierta preocupación con Fran Pérez, porque lleva tiempo parado, y ya no es sólo esta temporada sino la pasada. Hay que saber cuál va a ser su proceso de recuperación y eso nos pondría en alerta, por si pudiéramos tener la posibilidad de alguna opción más", comenta en la rueda de prensa previa al choque con el FC Barcelona.
Respecto al tipo de jugador que busca en el mercado –estando también abierta la posibilidad de ir a por un central–, Baraja recalca que lo importante es que el futbolista que venga refuerce de verdad al equipo, ya que en caso alguno se quiere cortar la progresión a los canteranos.
"Los que lleguen tienen que venir a reforzar o mejorar las posibilidades del equipo, porque hay que salvaguardar las opciones de canteranos como Martín Tejón, Íker Córdoba, Ali Fadal o Rubén Iranzo, que han venido haciendo un buen trabajo y que van a ayudar. El mercado está abierto. Para nosotros todo lo que sea competencia, elevar el nivel y que haya variantes y alternativas en la plantilla es bueno, pero la sensación es que cuando hemos ido al mercado a buscar ese tipo de jugador que nos falta, no se ha dado", afirma.
Pese a conocer las dificultades económicas del club, Baraja no duda en apretar para conseguir lo que se necesita. "Me consta que seguimos trabajando en esa demarcación del extremo a pesar de que el nivel de inversión no puede ser alto por las limitación económicas y la dificultad que está atravesando el club. A partir de ahí, adaptarnos a la situación. Los datos son irrefutables, no puedo decir otra cosa", contesta al ser preguntado por el hecho de que el Valencia sea el segundo equipo que menos ha invertido en fichajes de Primera división.
Aunque el escenario no es ni mucho menos positivo, Baraja entiende que su papel no es entrar en asuntos que no puede controlar, sino centrarse en la parte buena de las cosas. "Hay que pensar en lo positivo, porque en la vida tienes dos opciones: sacar lo positivo o lamentarse con lo que nos gustaría. Me quedo con optimizar la plantilla y tratar de sacar el máximo rendimiento", sentencia.