Punto clave a favor del Valencia

El Valencia afronta este final de temporada en LaLiga fuera de los puestos de descenso a Segunda división tras sumar 28 puntos una vez que se han jugado 28 jornadas. Eso le permite al equipo entrenado por Carlos Corberán tener un punto de ventaja sobre sus rivales directos por la permanencia en Primera división que están situados en los últimos tres puestos de la clasificación de LaLiga. Un posición favorable, pero que no permite exceso de confianza gracias al buen arranque de segunda vuelta que ha hecho un Valencia que para rematar la permanencia en Primera división tiene ante sí un calendario, a priori, favorable en sus partidos como local.

Al Valencia le quedan diez partidos para acabar la temporada y la realidad es que es en el Estadio de Mestalla en donde puede certificar su permanencia en Primera división debido a que no tiene un calendario duro. Es complicado, como el del resto de equipos, porque se enfrentará a conjuntos que se están jugando mucho en este final de campaña, pero son contrincantes a los que el Valencia debe ganar.

Los cinco equipos a los que se tiene que enfrentar el Valencia en casa en esta recta final de LaLiga son el Mallorca, el Sevilla, el Espanyol, el Getafe y el Athletic Club. Algo más complicados son sus encuentros como visitante, ya que el equipo que entrena Carlos Corberán se medirá al Real Madrid, al Rayo Vallecano, a Las Palmas, al Alavés y al Betis.

Su primer rival en casa será el Mallorca, el cual está peleando por clasificarse para jugar competición europea la próxima temporada. Mismo caso que ocurre con el siguiente conjunto que visitará Mestalla que es un Sevilla que no termina de encadenar victorias. A continuación, el Valencia está obligado a ganarle al Espanyol, que es un rival directo por la permanencia. También visitará Valencia un Getafe que está prácticamente salvado y en donde José Bordalás, su entrenador y ex del Valencia, ya tiene el objetivo prácticamente cumplido. Por último, el Valencia cerrará LaLiga en casa en la penúltima jornada contra un Athletic Club que a esas alturas, probablemente, no se juegue nada en el campeonato de Primera división.

Las cuentas son claras, si el Valencia gana cuatro o los cinco partidos sumará los puntos suficientes, entre 40 y 43 puntos, para conseguir la permanencia en Primera división lo cual se convirtió en el objetivo del club después del mal arranque de campaña.