No es la primera vez que en los estadios se pueden escuchar comentarios racistas lanzados desde las gradas por parte de aficionados, algo que viven muy de cerca muchos jugadores y a lo que LaLiga intenta poner fin.
La entidad ha recogido un nuevo informe de la jornada 32 en la que denuncia el incidente que hubo en el estadio del Cádiz CF, donde el jugador del Valencia Mouctar Diakhaby se vio afectado.
LaLiga también incluyó en su denuncia una situación similar vivida en la jornada 31 en el campo del Girona en el partido disputado contra el Real Madrid, en el que los insultos fueron dirigidos hacia Vinicius Junior, un jugador que ya en varias ocasiones ha alzado la voz ante este irrespetuoso suceso.
El documento no solo incluye las cinco incidencias en el Girona-Real Madrid del 25 de abril, donde los protagonistas de este acto fueron unos 300 aficionados locales, sino también menciona la situación vivida en el Nuevo Mirandilla.
Concretamente se mencionan los insultos generados por unos 400 aficionados del Cádiz CF pertenecientes al grupo “Brigadas Amarillas” a través de cánticos que iban dirigidos al valencianista Diakhaby y luego al portero visitante, Giorgi Mamardashvili. Los insultos contra el central no son nuevos, pues ya en 2021, el jugador denunció a Juan Cala por este tipo de actos. Desde entonces, los partidos contra el conjunto amarillo se han vuelto muy pesados para el defensa.
"1. Un minuto antes del inicio del partido, estando ya el equipo arbitral y ambos equipos sobre el terreno de juego, unos 400 aficionados locales, ubicados en Fondo Sur, Grada Baja Central, pertenecientes al grupo de animación local "Brigadas Amarillas", liderados por un integrante con megáfono, entonaron de forma coral y coordinada durante aproximadamente 10 segundos, el cántico, ‘Diakhaby hijo de puta’, dirigido a un jugador visitante, y siendo secundado por gran parte de los aficionados presentes en el estadio”, ha plasmado LaLiga en el escrito publicado.
LaLiga remite cada semana un escrito en el que denuncia al Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y a la Comisión Antiviolencia todos aquellos cánticos realizados por los aficionados que inciten a la violencia o tengan algún tipo de contenido insultante o faltas de respeto hacia los jugadores u otras personas. Estos cánticos aparecen recogidos como comportamientos prohibidos y por tanto sancionables, tanto en el Código de Disciplina Deportiva de la RFEF como en la legislación contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.