Ramazani tiene claro dónde quiere jugar

Largie Ramazani es uno de esos futbolistas que consiguen levantarte del asiento durante un partido de fútbol. Un jugador distinto y muy vertical y un ídolo durante varios momentos para la Unión Deportiva Almería. El belga no pasa por un buen momento y está en horas bajas, pero la afición rojiblanca le ha mostrado su cariño. Varios equipos han preguntado por él en este mercado de fichajes.

A pesar de haber salido en varias noticias en las últimas semanas, en ESTADIO Deportivo hemos podido conocer el pensamiento del jugador acerca de su futuro. Sobre los rumores de una posible oferta del Olympique de Marsella, el entorno del jugador aseguró que eran solo hablarías. Ramazani tiene claro dónde quiere jugar: en LaLiga o en la Premier League, según hemos podido saber desde dicho entorno. Cualquier oferta que llegue desde otro país, de momento el jugador no estaría dispuesto a escucharla.

El partido frente al RCD Espanyol se vivió como una auténtica fiesta en el Power Horse Stadium. Hacía tiempo que los almerienses no se divertían de esa manera en se campo. ¿Dónde estaba Ramazani en esa fiesta? En el banquillo, Rubi le había reservado tras su partido frente al Valencia. No fue por ningún toque de atención, al igual que también hizo con otros cambios en el once. Simplemente el técnico catalán explicó con coherencia que hacía tan solo cuatro días que habían disputado el último encuentro.

"Tenemos una plantilla compensada e igualada y todos están preparados. Tengo confianza en mis decisiones, no hago las alineaciones por capricho. Son cinco cambios porque buscábamos frescura. Quiero que se peleen entre ellos por la titularidad", aclaró Rubi tras el partido ante los pericos.

Ramazani no jugó ni un minuto y frente al Valencia falló un penalti que le hizo tocar fondo. De hecho, se borró algunas de sus redes sociales. La afición rojiblanca no tardó en pronunciarse, animando al belga. Se ha hablado mucho del delantero en este mercado de fichajes, pero su posición está más que clara.

El belga es uno de los jugadores con la cláusula de rescisión más alta en la plantilla rojiblanca. Asciende a un total de 40 millones y por supuesto Turki no está dispuesto a dejarlo salir. El mandatario de la UD Almería ya ha demostrado que es un hueso duro de roer en las negociaciones. A pesar de ello, siempre habrá que tener en cuenta la posición del jugador, que está más que clara.