Tras la salida de Sergio Ramos, que no aceptó la oferta de renovación que Del Nido Carrasco le puso sobre la mesa, el Sevilla FC necesita reforzar un eje de la zaga donde cuenta con Kike Salas y Badé como elementos fijos, amén de la aportación de Gudelj. En otra situación muy diferente se encuentran Marcao y Nianzou, a los que se les busca una salida a sabiendas de que será muy complicado colocarlos, sin descartar incluso la rescisión de contrato del brasileño.
Ante este escenario, han sonado nombres como los de Saúl Coco, cuyo vínculo con la UD Las Palmas acaba en 2025 y que está igualmente en la agenda del Betis, como el último en nombre en sumarse a la palestra. En la presentación de Ejuke, Víctor Orta ya dejó claro que la delicada economía nervionense le obliga a moverse en busca de jugadores cedidos, libres o que estén próximos a finalizar sus contratos, encajando en esa hoja de ruta la opción apuntada por El Crack Deportivo, medio argentino que indica que el club sevillista ha preguntado por las condiciones de Nicolás Valentini.
ESTADIO Deportivo ya informó de la existencia de contactos entre el club de Heliópolis y la agenda del futbolista, pero los verdiblancos no han avanzando en este frente, con Vitao y Diego Llorente como grandes objetivos para su zaga, y desde Nervión se habrían interesado por la situación de un futbolista que acaba contrato dentro de seis meses, el próximo 31 de diciembre, y se ha negado a renovar con Boca Juniors, motivo por el cual está apartado del equipo desde el pasado mes de mayo.
De momento, el defensor de 23 años se encuentra a las órdenes de la pretemporada 'xeneize', tras incorporarse más tarde a la misma, pero en su país dan por hecho que saldrá este verano, dado el conflicto que mantiene con su actual club. Una 'guerra' abierta que le ha llevado a ser sancionado además por la AFA, no pudiendo ser convocado por la sub 23 de Argentina para los Juegos Olímpicos de París, pese a ser un habitual titular para Mascherano en el Preolímpico.
El problema es que Juan Román Riquelme, presidente de Boca Juniors, no quiere que el jugador se salga con la suya, remitiendo a todos los interesados a su cláusula de rescisión, que se eleva a 10 millones de dólares (9,3 millones de euros al cambio). Una cifra excesivamente elevada a la que el Sevilla FC no llegaría bajo ningún concepto, aunque es de esperar que el conjunto bonaerense rebaje sus pretensiones, si no quiere verlo marchar gratis a final de año.
De momento, el mayor mercado de Valentini parece estar en Italia, donde ha sido relacionado con clubes de la talla del Inter de Milán, el Nápoles o la Lazio, además de la Fiorentina en los últimos días. Pero a la hora de la verdad, es el recién ascendido Como de Cesc Fàbregas el único que parece dispuesto a pasar a la acción, según ha informado el periodista Gianluca di Marzio. Orta, mientras tanto, habría tomado posiciones por si surge la oportunidad.