Almería
Sevilla
Dodi Lukébakio, una de las principales esperanzas ofensivas hasta la fenomenal irrupción invernal de Isaac Romero, volvió a vestirse de corto 93 días después de su desgraciada lesión en Palma de Mallorca. Tres largos meses de ausencia del belga, que pasó sin llamar cuando Quique Sánchez Flores le encomendó hacer de Youssef En-Nesyri, desafortunado en el Power Horse Stadium. Frustrado en su primera intervención por César Montes, le pilló bien la espalda a continuación el mexicano para aliarse con el lebrijano el suerte suprema y demostrar que, cuando la enfermería deje de apretar, el Sevilla FC tiene argumentos de sobra para amarrar la permanencia con holgura. Lucas Ocampos se sumó a la fiesta, pero también Marko Milovanovic, por lo que no hubo sonrisa plena en tierras almerienses. Por ver de nuevo jugando y sin resentirse al ex del Hertha de Berlín y otro que lo ha pasado mal, Nemanja Gudelj, por supuesto que sí.
NYLAND: 5
Despejó varias, pero blocó pocas. Bien con los pies para iniciar contragolpes.
JESÚS NAVAS: 5
Poca profundidad y muchos huecos a su espalda para Centelles, Embarba y compañía. Bastante hizo con forzar tras un esguince de tobillo que le permitió jugar una hora... cuando se esperaba una baja de varias semanas.
BADÉ: 4
Desquiciado en el primer tiempo, llegó tarde a menudo, se cargó enseguida con una amarilla y protagonizó varias pérdidas. Sufrió para intentar cubrir los espacios tras Navas, aunque se entonó tras el paso por vestuarios, sujetando con más fiereza a Embarba... hasta esa última jugada que no marcaba a nadie.
SERGIO RAMOS: 6
Contundente y tirando de oficio, le faltó acompañamiento en la contención.
KIKE SALAS: 5
Mejor en sus incorporaciones al ataque que en las marcas atrás (un despiste casi cuesta caro ante Luka Romero y se la jugó con un agarrón en el área a Lozano). Subió el rendimiento en las vigilancias al argentino en la reanudación.
OCAMPOS: 6
Muy vertical en sus salidas desde atrás como carrilero, eligió a la postre mal casi siempre, como en el pase de la muerte del minuto 3 que no llegó a En-Nesyri. Anotó el 1-2 porque, en realidad, prefiere mil veces estar arriba, aunque le tocó cambiar de banda y mirar hacia atrás más de lo aconsejable.
SOUMARÉ: 6
Clave en sus anticipaciones y en sus coberturas, rompió líneas también para generar superioridad en campo contrario. Su físico es inestimable en este Sevilla.
SOW: 4
Creó peligro cuando se asomó al área indálica, pero Soumaré echó de menos sus ayudas en la resta con Viera.
ÓLIVER TORRES: 5
Flotó entre líneas, cayendo a las bandas y ocupando los espacios que generaban sus compañeros con los desmarques. Cada vez que intervino, el peligro se olía, aunque fue demasiado intermitente.
EN-NESYRI: 4
No se entendió tan bien como otras veces con el lebrijano y se la jugó muy pocas veces de manera individual. Prácticamente nunca se puso de gol y le ganaron generalmente por alto César Montes, Edgar y Radovanovic.
ISAAC ROMERO: 7
Con el gol entre ceja y ceja, lo intentó de todas las maneras, pero Maximiano le amargó con sus paradas, tres de ellas a bocajarro, en el primer tiempo. Asistió a Lukébakio en el gol del empate y nunca bajó los brazos.
SUSO: 6
Su zurda es oro a balón parado. Lástima esa amarilla absurda por protestar al final que le impedirá estar contra el Celta en un duelo crucial.
ACUÑA: 6
Inspirado como carrilero para desbordar y centrar con mucho peligro varias veces.
GUDELJ: 5
Frenó las contras del Almería e hizo circular el balón con criterio.
LUKÉBAKIO: 6
Se juntó con Isaac para ser 'falso 9' y marcó el tanto del empate. Luego, se volvió un poco loco y eligió mal cuando tenía el viento de cola por pura precipitación. Su calidad y su verticalidad se echaron de menos estos tres meses.
QUIQUE SÁNCHEZ FLORES: 5
Fiel al dibujo híbrido que estrenó en Vallecas y tan bien le ha funcionado desde entonces, recurrió de nuevo a Ocampos en su doble papel de carrilero (en un 1-5-3-2 en fase defensiva) y extremo (1-4-4-2 con balón), primero por la izquierda y luego por la derecha, volviéndolo un poco loco, la verdad. Intentó arriesgar con un 'trivote' más creativo, pero rectificó enseguida. Le salió bien con Lukébakio de 'falso 9' para aprovechar los movimientos de desmarque y la aceleración de Isaac.