Álvaro Palomo4 min lecturaEn plena controversia por la renovación sorprendente de García Pimienta hasta 2027, anunciada por José María del Nido Carrasco tras la victoria contra el Valladolid, ha irrumpido un nuevo capítulo sobre la salida de Quique Sánchez Flores de Nervión con declaraciones relevantes que dejan entrever los problemas entre el entrenador madrileño y el club nervionense.
Lo cierto es que en las últimas semanas el nombre de Quique ha reaparecido en la actualidad sevillista por su cruce de declaraciones con Rakitic acerca de los motivos por los que el croata se marchó en enero del Sánchez-Pizjuán y también porque un sector de la afición le echa de menos a tenor de que el nuevo proyecto no termina de arrancar.
A la polémica con Rakitic se le ha sumado ahora unas palabras del que fuera su segundo en el Sevilla, José Luis Oltra, quien, en una entrevista a Canal Sur Radio, trató los motivos por los que no continuaron una temporada más a pesar de haber conseguido con creces los objetivos, llegando a morderse la lengua para no hablar más de la cuenta. En este sentido, dijo claramente que no les seducía un proyecto que, de partida, no pintaba bien.
“La continuidad estaba condicionada a la clasificación, sí. No es nuestra forma de ser estar en un proyecto si no estamos de acuerdo. Si no tenemos claro el proyecto y también la sensación de que se quiere empezar un proyecto ya mal, es estar abocado al fracaso. Ya hay cosas que ni debo ni puedo contar. Hemos pasado por momentos complicados, tanto ellos como nosotros”, señaló Oltra, que, no obstante, aseguró que se fueron convencidos de haber hecho un buen trabajo.
“Nos fuimos convencidos de que hemos hecho un buen trabajo, con la satisfacción del reconocimiento, yo creo que interno también, pero sobre todo externo. Y a partir de ahí, como digo, puertas abiertas, desearle lo mejor al club y luego cada uno intentará hacer su camino, que no se sabe si en el futuro se podrá volver a juntar”, apuntó el segundo de Quique, que admitió que, cuando llegaron, se encontraron un vestuario con miedo.
“Había miedo en el Sevilla al descenso. Incluso nosotros al principio lo percibimos en los propios futbolistas. Nosotros recibimos algún comentario, no voy a dar nombres, de algún jugador, de decirte después de un partido el respiro que habían tenido por haber logrado la victoria. Lo recuerdo después del partido del Rayo Vallecano que algún jugador nos lo dijo, o después de ganar en Granada, también”, indicó Oltra, que insistió en que la preocupación por mantener la categoría era evidente: “Quique nos contó varias veces al cuerpo técnico que en la primera reunión que tuvo con el director deportivo, con Pepe Castro y con José María del Nido Carrasco, le transmitieron esa preocupación".