El Sevilla podrá vivir un día de fiesta tranquilo. El equipo de Sampaoli logró su primera gran goleada de la temporada, en el mejor partido que se le recuerda en mucho tiempo y hoy disfruta ante los suyos de ese logro. Ni en el mejor guion lo habría logrado cuadrar mejor. Cuando hace tres días pusieron el entrenamiento de este 5 de enero a puerta abrierta corrían el riesgo de que se les volviera en contra, pues Linares ni parecía una plaza fácil, pero el 0-5 lo dejó todo en bandeja para que se viviera el ambiente que se ha podido ver en el Ramón Sánchez-Pizjuán.
Miles de sevillistas han arropado al equipo de Jorge Sampaoli en el coliseo de Nervión. Ya había colas antes de empezar y desde que se abrieron las puertas del estadio, a las 11:00 horas, no han parado de entrar aficionados, especialmente niños. Y eso que hoy no es día de fiesta.
Es el mejor adelanto del día de Reyes que mañana disfrutarán los pequeños y que esta tarde, con la Cabalgata de Reyes Magos de Sevilla, se volcará toda la ciudad. Antes del inicio del entrenamiento, los Reyes pisaron el césped del estadio sevillista y repartieron ya obsequios para los más pequeños.
Aplausos para un Sampaoli que ha devuelto la ilusión antes de la salida de los jugadores, una salida que ha estado presidida por el himno, como si fuera un partido oficial.
En lo estrictamente deportivo. Loïc Badé pudo realizar al fin su primer entrenamiento como jugador del Sevilla FC, una vez que ayer quedaron solucionados los últimos flecos y el club hizo 'oficial' su fichaje. De estar recuperado totalmente de las molestias a las que aludió Sampaoli hace un par de días, ya podría ser de la partida ante el Getafe, en un encuentro en el que José Ángel Carmona es baja por sanción, al igual que Montiel, que cumplirá su último partido tras ver la roja en el derbi de noviembre. Nianzou y Rakitic también podrán regresar.
A Rafa Mir, ausente en el partido de Copa por lesión, ya se le pudo ver con las botas puestas, por lo que se presupone que estará el domingo ante el Getafe. Aunque el entrenamiento es más un acto festivo, en el que también se puede ver peloteando a los hijos de algunos jugadores, a nadie escapa que la presencia de murciano o de Badé da más opciones a Sampaoli para el partido próximo.
Los jugadores que disfrutaron de más minutos disfrutaron en el estadio de Linarejos tenían previsto retirarse a cerrar el entrenamiento en el gimnasio mientras que, sobre el césped, se quedaban los que no había jugado en la Copa. Sin embargo, todos tenían previsto volver al final del entrenamiento para repartir regalos entre los aficionados presentes en el estadio.
Los que apenas contaron con minutos o no participaron jugaron un partidillo de entrenamiento que hizo las delicias de los aficionados. En ella, hubo mucha presencia canterana, que dejaron muy buenos detalles. Telles, Delaney, Marcao, Rekik, Papu Gómez o Tecatito, los lesionados de este plantel, se echaron en falta.
"Todos los que somos padres sabemos la importancia del día de hoy y de mañana. Gusta mucho ver esta emoción y este buen ambiente, ojalá se traduzca buenos resultados y se disfrute en el campo", señala Ivan Rakitic en la televisión oficial del club, quien sabe lo que son los Reyes después de más de una década en España y con dos hijas españolas. "Ver ese brillo en los ojos de los niños nada lo puede igualar, es único. Y ver tantos niños aquí y disfrutar con ellos es lo mas bonito que hay. Es una pena que sólo lo disfrutemos una vez al año", añadía.
El capitán del Sevilla FC espera que este baño de masas repercuta el domingo en un gran partido. "Lo acabo de decir. El domingo va a arder el estadio, va a ser una locura, ojalá lo traduzcamos en buen juego y resultados. Venimos de una dinámica positva y esto pinta muy interesante", indicaba Rakitic, que se reencontrará con Munir el Haddadi, héroe copero de los getafenses.
Aunque los primeros datos que ofreció el club en el arranque de la sesión dejaban la presencia de 12.000 aficionados, los seguidores no dejaron de entrar a lo largo del entrenamiento matutino y, a mitad de mismo, dieron una cifra oficial de 18.732 aficionados en las gradas del Pizjuán.