Koundé responde al sevillismo: "Fue exagerada por mi parte"

El Sevilla Fútbol Club aguantó lo que pudo en el Camp Nou. La imagen del equipo de Jorge Sampaoli, que venía en clara ascendencia, volvió a ser la de un equipo amedrentado y muy a la defensiva, más atento de no encajar que de ir a buscar la portería rival. Y eso, tarde o temprano, se acaba pagando. Le salió bien en la primera parte, que acabó con tablas en el marcador, pero en la segunda parte la balanza se acabó decantando para el lado azulgrana.

Aguantó una hora, hasta que el una buena jugada del FC Barcelona por el flanco de Montiel la acabó finalizando Jordi Alba. Lo celebraba con mucha rabia el lateral izquierdo azulgrana, que lograba abrir la lata, pero a muchos sevillistas le llamó la atención también cómo lo celebró Jules Koundé, que fue el primero en salir a la carrera detrás del capitán blaugrana.

Parece que eso no sentó nada bien a buena parte de la afición sevillista, pues apenas hace unos meses el central francés todavía era un jugador que pertenecía a la plantilla del Sevilla FC. No en vano, el pasado verano fue traspasado al conjunto barcelonés a cambio de 50 millones de euros más 10 en variables después de tres temporadas en Nervión que le sirvieron para dar un salto en la elite y ser internacional con Francia. 133 partidos con el escudo del Sevilla en los que anotó nueve goles y dejó tres asistencias.

Por eso, mucho sevillistas no entendían la exagerada celebración del gol de Jordi Alba contra su exequipo. Y parece que ese malestar ha llegado a oídos del propio Jules Koundé quien, a través de sus redes sociales, ha querido pedir disculpas a los sevillistas asegurando que fue algo fruto de la tensión del momento.

"Siempre fue agradecido por la oportunidad de vestir la camiseta rojiblanca y por el cariño que recibí durante mi tiempo allí. Por eso quería pedir disculpas por la celebración del gol que, dentro de un momento de euforia, fue exagerada por mi parte. Os deseo lo mejor, siempre", escribió Koundé zanjando así el asunto.

Y es que tampoco es de extrañar que fuera el primero en llegar a abrazar a Jordi Alba, ya en su etapa en el Sevilla también era muy común verlo así. Curiosamente el central francés siempre salía el primero celebrando o felicitando al autor del tanto en la mayoría de los goles.