En la complicada situación económica en la que se encuentra el Sevilla FC, con el límite salarial más bajo de LaLiga, las ventas de sus principales activos se antojan prácticamente obligatorias para tratar de volver cuanto ante a la famosa regla del 1:1. Ya se marchó en verano su gran goleador, Youssef En-Nesyri, y tampoco se dejó pasar la oportunidad de ingresar 7 millones de euros por Lucas Ocampos pese a estar ya cerrado el mercado en Europa. Incluso, se tanteó el posible traspaso de Loïc Badé, pero fue el jugador francés el que descartó esa posibilidad que en el club sí era bien vista.
Tras su brillante participación en los Juegos Olímpicos de París, el central manejó durante el verano sendas ofertas del Suttugart y la Roma. Ambos clubes pusieron sobre la mesa ofertas de 20 millones de euros que colmaban las exigencias nervionenses. Pero el zaguero las tumbó. "No quise irme porque he cambiado muchas veces de club en mi carrera. Aquí me siento bien y necesito estabilidad y por eso quise seguir aquí", señaló posteriormente, después de ampliar su contrato hasta 2029.
Sin embargo, Badé sigue siendo uno de los jugadores con mayor cartel de la plantilla y el próximo verano podría haber de nuevo movimientos con respecto a su futuro. De hecho, desde Inglaterra se informa de que es uno de los cuatro centrales que el Liverpool tiene en su agenda para suplir la posible salida de Van Dijk, que, a sus 33 años, acaba contrato el próximo mes de junio y podría salir de Anfield después de marcar una época.
De concretarse ese interés del conjunto inglés en una propuesta concreta, puede que el defensor sevillista sí cambie de respuesta, pues la oportunidad que supondría aterrizar en uno de los grandes de la Premier League resulta sin duda muy atractiva. Ahora bien, la competencia es dura, pues el director deportivo Richard Hughes ya trabaja en la búsqueda de un sucesor para el veterano central neerlandés y tiene a otros tres en cartera, según desvela TEAMtalk.
Así, el favorito es el inglés Marc Guehi, del Crystal Palace, que este pasado verano no aceptó una oferta de 58 millones de euros del Newcastle. El hecho de que sólo le quede un año más de contrato, sin embargo, alimenta el optimismo de los 'reds' para intentar rebajar sus pretensiones. Pero por si acaso, en la recámara están también el portugués del Sporting Goncalo Inácio, muy del gusto de Arne Slot e igualmente codiciado por varios grandes, y el brasileño Gleison Bremer, al que tampoco será sencillo sacarlo de una Juventus que pediría en torno a 70 kilos.
En el caso de Badé, se apunta que el plan del Liverpool pasa por seguir monitoreando su rendimiento durante la presente temporada. Su cláusula de rescisión se mantiene en 50 millones de euros, pero llegado el caso, la entidad británica buscaría rebajarla. En Nervión ni mucho menos verían con malos ojos su salida.